Los Mossos despliegan un control de seguridad en la polémica discoteca Waka
La operación se salda con 10 personas denunciadas por tenencia de drogas y una por falta de respeto a la policía
Un dispositivo policial de seguridad ciudadana en la polémica discoteca Waka de Sant Quirze del Vallès (Barcelona) se ha saldado con diez personas denunciadas por tenencia de drogas y una por falta de respeto a la policía, según han informado los Mossos d’Esquadra. Esta discoteca ha vivido diversos episodios de conflictos y el pasado diciembre trascendió la denuncia por la difusión masiva, a través de redes social...
Un dispositivo policial de seguridad ciudadana en la polémica discoteca Waka de Sant Quirze del Vallès (Barcelona) se ha saldado con diez personas denunciadas por tenencia de drogas y una por falta de respeto a la policía, según han informado los Mossos d’Esquadra. Esta discoteca ha vivido diversos episodios de conflictos y el pasado diciembre trascendió la denuncia por la difusión masiva, a través de redes sociales y de mensajería, de imágenes de una menor de 16 años practicando una felación en la pista de este local a un joven mayor de edad.
Esta pasada noche, los Mossos d’Esquadra han llevado a cabo uno de los dispositivos de seguridad ciudadana que hacen periódicamente en entornos de ocio nocturno y en este caso han accedido al interior de la discoteca Waka. El cuerpo policial ha identificado a 906 personas, 10 de ellas han sido denunciadas por tenencia de drogas y una por falta de respecto a la autoridad.
En el dispositivo han participado las Áreas Regionales de Recursos Operativos (ARRO), que son efectivos policiales adicionales para una comisaria que los requiere de forma puntual, así como las unidades de Seguridad Ciudadana y Policía Administrativa.
La discoteca Waka está situada en la conocida como Zona Hermética de Sabadell (Barcelona) pero ya en el término municipal de Sant Quirze del Vallès, cuyo Ayuntamiento ha exigido en diversas ocasiones a la Generalitat que ejerza sus competencias para controlar lo que ocurre en su interior.
Además del caso del vídeo de la menor practicando una felación en medio de la pista, han habido en los últimos años otros incidentes racistas y sexuales, por lo que el consistorio considera que es una discoteca “insegura y problemática” que debería ser cerrada.
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