Estudiar derribando murallas

Iuliana Constantin es una de las jóvenes del Raval que se ha graduado este año con la ayuda del proyecto educativo ‘Prometeus’

La ya graduada Luliana Constantin.CRISTÓBAL CASTRO

“En mi familia nadie había estudiado una carrera universitaria”, se lamenta Iuliana Constantin. A sus 24 años, ha completado los estudios de Química en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB). Ella es una de los 15 jóvenes de la primera promoción graduada del programa Prometeus, un proyecto iniciado en el ...

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“En mi familia nadie había estudiado una carrera universitaria”, se lamenta Iuliana Constantin. A sus 24 años, ha completado los estudios de Química en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB). Ella es una de los 15 jóvenes de la primera promoción graduada del programa Prometeus, un proyecto iniciado en el barrio del Raval que vela porque chicos y chicas puedan acceder a la universidad y cursar estudios superiores indistintamente de su situación económica y social. Iuliana, sin embargo, no tenía referentes. Esa era su gran muralla. No contaba con familiares ni amigos que hubieran seguido estudiando. Ni siquiera ella estaba muy segura de querer hacerlo. “Vengo de una familia humilde, y no sabía si podría llegar a mantenerme durante todo este tiempo”, cuenta. Ahora, ha conseguido derribar esa barrera y graduarse tras años de incansable esfuerzo.

Iuliana llegó de Rumanía cuando tenía 16 años y aterrizó en el Raval. Su madre trabajaba en España, en el sector de la limpieza, y cuando tuvo los recursos económicos para hacerlo, se la trajo con ella. No conocía el catalán ni el castellano. Empezó 4o de ESO sin apenas entender una palabra. Pasó al bachillerato en el Milà i Fontanals, uno de los dos institutos públicos que persisten en el barrio. “Iba a un casal, en la Asociación Educativa Integral del Raval (AEI Raval), donde por las tardes hacía los deberes, además de refuerzo de las dos lenguas”, explica ella. Recién llegada de un país lejano y con un idioma y cultura totalmente diferentes, el casal le sirvió de salvavidas. Le traducían expresión a expresión y la ayudaban para que pudiera avanzar a la vez que sus compañeros y seguir el curso con los de su edad. En el AEI Raval fue donde conoció a Javier Alegría y Edgar Iglesias, impulsores de Prometeus y quienes la animaron a adentrarse en él.

“A finales de bachillerato me preguntaron si me quería incorporar al proyecto”, relata. Le dijeron que iba a ser una gran oportunidad ya que le serviría de trampolín para poder acceder a la universidad. Fue en ese momento cuando empezaron las dudas. El tema económico era lo que más preocupaba a Iuliana. Prometeus es un programa que lucha contra la desigualdad de oportunidades. Una desigualdad que, en este caso, venía marcada por el lugar donde te habías criado o habías crecido. Poco antes de que se pusiera en marcha, Iuliana ya se planteaba continuar con sus estudios. “A mi familia le costó un poco entenderlo, porque sabía que ir a la universidad era algo muy caro y que, además, implicaría que yo me iba a independizar más tarde”, pero Prometeus fue el punto de inflexión que le abrió todas las puertas.

Con la ayuda del proyecto ha recibido apoyo económico, social y emocional. “Y, sin duda, mucha ayuda por parte de los compañeros de forma altruista”, declara. Iuliana ha tenido que llevar tres vidas a la vez. Y eso ha sido lo más complicado para ella. “Poder dedicar tiempo a la universidad, a mi familia y a trabajar ha sido lo más duro”. Para poder llegar a fin de mes tuvo que trabajar, ya que su madre necesitaba ayuda en casa. Ni siquiera contemplaba la vida social. “Eso también”, se ríe, “pero mientras he estudiado no he tenido demasiada vida social”.

De pequeña, Iuliana no imaginaba que acabaría graduándose en Química. “Siempre me han gustado las ciencias, pero siendo mayor descubrí que había muchas complicaciones”. Hace poco ha empezado a trabajar en el sector y ahora mismo es técnica investigadora junior en un centro de Cataluña. “Me gustaría en un futuro seguir estudiando, hacer un máster”, asegura. Aunque todavía no tiene muy clara la dirección de este último, sabe que quiere hacer un máster público, “porque los privados son muy caros”. Probablemente, Iuliana se decante por la especialización en materiales o en química orgánica. Como ella, muchos otros podrán disponer de ayudas para acceder a estudios universitarios. Prometeus, de la mano del Pla de Barris y de Barcelona Ciència i Universitats, se ha extendido a los barrios de Besòs, Maresme, la Verneda, la Pau, Torre Baró, Ciutat Meridiana y Vallbona, y es un programa clave en el ámbito educativo.

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