El cónsul holandés que inaugura lavabos en la estación de Sants de Barcelona
Una empresa de Países Bajos instala inodoros de última generación en la infraestructura ferroviaria
Dirk Kremer es el cónsul honorario de Países Bajos en Barcelona. La mañana de este miércoles ha sido el encargado de cortar la cinta con la que inauguraba las instalaciones de una empresa de origen holandés en la capital catalana. La empresa es One Hundred y la instalación unos nuevos lavabos públicos en la ...
Dirk Kremer es el cónsul honorario de Países Bajos en Barcelona. La mañana de este miércoles ha sido el encargado de cortar la cinta con la que inauguraba las instalaciones de una empresa de origen holandés en la capital catalana. La empresa es One Hundred y la instalación unos nuevos lavabos públicos en la estación de tren de Sants. “Es la primera vez que como cónsul inauguro unos lavabos pero debo decir que me llamaron hace dos semanas y cuando me los propusieron no dude ni un solo segundo en decir que vendría a hacerlo”, admitía ayer Kremer mientras visitaba tazas de váter, espejos, grifos y picas de la última generación.
“Es normal que un cónsul inaugure inodoros porque ir al lavabo algo habitual y que ayuda a la gente. Además, para mí es positivo ver como un grupo de empresarios holandeses innovan en este sector y son capaces de unir higiene, seguridad y limpieza con el servicio público”, admitía el cónsul poco antes de cortar la cinta con la que se estrenaron los baños.
El director general de One Hundred España, Niels Bakker, estaba exultante ante la apertura de sus primeros lavabos de última generación en Cataluña. “En la estación de Atocha abrimos hace poco. Yo llevo más de 20 años en esta ciudad y aunque soy un guiri eterno estoy muy contento por lo que significa el día de hoy para nuestra empresa y para el servicio que vamos a prestar”, admitía Bakker. Acto seguido se convertía en un auténtico cicerone de unos lavabos que para utilizarlos hay que desembolsar un euro y pasar por unos tornos.
“Alíviate, refréscate y recárgate”, ese es el lema inventado por la empresa para seducir a sus clientes. Bakker muestra espejos que se convierten en pantallas con información metereológica, baños limpios y con luces “que tienen apariencia de ser solares”.
Belkis es una de las empleadas que se dedicará a tener siempre limpia la zona. “Callaros un momento porque os estáis perdiendo lo mejor. Escucháis el sonido de los pájaros”, ordena la operaria señalando un hilo musical basado en la naturaleza que acompaña al cliente durante todo su periplo por este lavabo de alta tecnología.
La ambición del empresario no tiene límites y anuncia que en octubre se abrirá, también en la estación de Sants, un lavabo mucho mayor con servicio de ducha y una báscula que con el euro de la entrada proporcionará un pequeño test de salud. La nueva instalación tendrá punto de agua gratuito, sala de lactancia y duchas cuyo precio serán de cerca de tres euros. One Hundred Restrooms ya ha ganado la licitación de Adif Alta Velocidad para instalar más aseos en otras estaciones como Chamartín Clara Campoamor Zaragoza Delicias y Alicante.
Tras la insólita inauguración de unos lavabos, el cónsul de Países Bajos, el empresario y representantes de Adif e incluso de la marca Roca brindaron con cava esperando un futuro próspero para el sector de los sanitarios.