Una web saca a la luz los 1.322 refugios subterráneos de la Guerra Civil en Barcelona

La página los localiza, documenta, cataloga y explica todos y permite visitar de forma virtual siete de ellos

Interior del Refugio 307 de la Guerra Civil situado en el barrio de El Poble Sec de Barcelona.© Joan Sánchez

El primer bombardeo que sufrió Barcelona durante la Guerra Civil, el 13 de febrero de 1937, fue el de los proyectiles lanzados por el destructor italiano Eugenio di Savoia contra la fábrica de material bélico Elizalde, que ocasionó 18 víctimas en el barrio de Gràcia. Al año, el primer bombardeo estricto, provocó otros seis muertos y 39 heridos después de que los aviones Savoia S-79 con base en Mallorca aprovecharan las primeras luces del día para sembrar de miedo y el terror en la po...

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El primer bombardeo que sufrió Barcelona durante la Guerra Civil, el 13 de febrero de 1937, fue el de los proyectiles lanzados por el destructor italiano Eugenio di Savoia contra la fábrica de material bélico Elizalde, que ocasionó 18 víctimas en el barrio de Gràcia. Al año, el primer bombardeo estricto, provocó otros seis muertos y 39 heridos después de que los aviones Savoia S-79 con base en Mallorca aprovecharan las primeras luces del día para sembrar de miedo y el terror en la población. Y a partir de entonces Barcelona se convirtió en la primera ciudad occidental bombardeada de forma sistemática desde el aire a pesar de estar en la retaguardia. Sufrió durante los tres años de la contienda, un total de 194 bombardeos que lanzaron 44 toneladas de bombas y acabaron con la vida de 1.816 personas y 2.710 heridos, en una ciudad de un millón de personas. El último bombardeo fue el del 24 de enero de 1939, dos días antes de la entrada de las tropas franquistas por la Diagonal al mando del general Yagüe.

La Generalitat creó, el 9 de junio de 1937, la junta de Defensa Pasiva de Cataluña que con el Ayuntamiento planificó, subvencionó y supervisó la construcción de un centenar de refugios para que la población estuviera a salvo. Pero otros cientos más se hicieron con iniciativa de los propios vecinos y particulares, sindicatos, empresas y partidos políticos, que fueron excavando túneles bajos sus viviendas y locales (muchas veces utilizando materiales de los edificios derruidos vecinos). Los refugios creados durante la Guerra Civil, tenían capacidad para 250.000 y 300.000 personas, ayudaron a salvar miles de vidas, y redujeron de forma considerable los estragos de esos vuelos cargados de muerte y destrucción. En la actualidad, son 1.322 los localizados en toda la ciudad (además de los túneles del metro), que, a partir de ahora y con ayuda de la tecnología, se pueden consultar en una nueva web, La ciudad de los refugios, que recogen 20 años de trabajo. La ha puesto en marcha la regiduría de Memoria Democrática de Barcelona que dirige Jordi Rabassa. Se ha presentado esta mañana, haciendo coincidir la fecha con los bombardeos más sangrantes que sufrió la ciudad el 16, 17 y 18 de marzo de 1938 con 270 muertos cuando una de las bombas hizo explotar un camión cargado con dinamita en el cruce de la calle Balmes con Gran Vía. Un suceso que fue portada de muchos diarios internacionales.

Fotografía, desde el avión italiano, del bombardeo realizado en marzo de 1938 sobre Barcelona.

La página web la han presentado este jueves el regidor y Carme Miró, responsable del Pla Barcino del Servei de Arqueología de Barcelona. Cuenta con gran cantidad de información que permite pasear por todos ellos (situados en un mapa de Barcelona en 1935) y conocer la documentación; expedientes, planos, imágenes y fuentes orales de los que se refugiaron allí y los objetos que se han localizado en su interior. Sobre todo, restos de avituallamiento, como botellas, suelas de calzados, bombillas, latas de conserva, pero también herramientas para construirlos o letreros que informaban a los ciudadanos como comportarse: “No correr”, “Permanecer sentados”, “Mantener la calma”, que ilustran la angustia de los que allí se refugiaban por no saber qué iba a pasar con sus vidas y qué se encontrarían al poder salir.

Las galerías del refugio antiaéreo de la guerra civil situado en la plaza del Diamant, en el barrio de Gràcia de Barcelona.Marcel.lí Sàenz

“Teniendo en cuenta que la mayoría de los hombres estaban en el frente, los refugios los realizaron mujeres, niños y personas mayores”, ha destacado Miró, que califica estas construcciones como “la obra más importante realizada por los ciudadanos de Barcelona” y la web, como “una herramienta y un punto de partida que permitirá, seguro, localizar más refugios en Barcelona”.

La web recoge también los refugios construidos ya durante la dictadura de Franco, hasta 1945. “Sobre todo en las zonas más importantes de la ciudad, como en el Paseo de Grácia, por lo que el objetivo solo proteger ante un eventual bombardeo durante la Segunda Guerra Mundial, solo una parte de la población”, según Miró. Entre ellos el que se construyó en los bajos donde hoy está la tienda de Apple en plaza de Catalunya. Y también los 14 que tuvieron una segunda vida, como el conocido como Refugio 307 que se dedicó a cultivar champiñones hasta que se abrió al público.

Una bombilla del refugio antiaéreo hallado en La Sagrera, que conserva incluso el filamento sin romperse.SABCN

La experta arqueóloga ha recordado que de todos ellos solo se pueden visitar tres: el Refugi 307, en Nou de la Rambla, a las faldas de Montjuïc que gestiona el Museo de Historia de Barcelona; el de la Plaça del Diamant, en Gràcia y el de la plaza de la Lira, en Sant Andreu. “La unidad del subsuelo de los Mossos d’Esquadra y los bomberos no permiten acceder a muchos de los refugios, porque estos espacios de confinamiento no reúnen condiciones”, ha remarcado Miró que asegura que el aparecido hace unos años en la Torre de la Sagrera, al lado de donde se construye la estación del AVE, será el próximo que se podrá visitar. “Por estar dentro de un equipamiento municipal”, ha recordado Rabassa. Porque, de hecho, “los refugios, como todo el subsuelo es, por ley, de la Generalitat, pero si los accesos están dentro de propiedades privadas, de vecinos o empresas, el control lo tienen ellos”, ha asegurado Miró. Por suerte, la página web permite hacer un recorrido virtual de siete de ellos tras haber realizado una reconstrucción en 3D de ellos.


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