La Fiscalía investiga los vertidos residuales en la playa de Castelldefels
La Guardia Civil recogió muestras en el corredor fluvial que desemboca en el arenal el pasado jueves
La Fiscalía de Medio Ambiente de Barcelona ha abierto diligencias para investigar los vertidos de aguas residuales en la playa de Castelldefels (Baix Llobregat), según fuentes judiciales. En el marco de esta investigación, el pasado 4 de marzo, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y un equipo del Grupo Especial de Actividades Subacutáticas de la Guardia Civil recogieron muestras en una zona húmeda de alto valor ambiental y en la desembocadura del canal plu...
La Fiscalía de Medio Ambiente de Barcelona ha abierto diligencias para investigar los vertidos de aguas residuales en la playa de Castelldefels (Baix Llobregat), según fuentes judiciales. En el marco de esta investigación, el pasado 4 de marzo, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y un equipo del Grupo Especial de Actividades Subacutáticas de la Guardia Civil recogieron muestras en una zona húmeda de alto valor ambiental y en la desembocadura del canal pluvial en la playa, confirman estas fuentes.
El Centro de Ecologista i Projectes Alternatius (CEPA) y el movimiento vecinal Salvem L’Olla del Rei presentaron el pasado junio una denuncia por al menos cuatro episodios contaminantes que, entre junio de 2019 y el mismo mes de 2020, provocaron la muerte de peces y obligaron al Ayuntamiento a prohibir el baño. La investigación también se extiende a la Olla del Rei, un estanque de tres hectáreas habitado por especies protegidas que colinda con el Institut de Ciències Fotòniques (ICFO). Los vecinos piden a los órganos competentes: la Agencia Catalana del Agua de la Generalitat y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), que pongan fin a los episodios contaminantes con la construcción de una estación de bombeo y la renovación del obsoleto tubo de impulsión de aguas residuales entre la problemática planta y la Estación de tratamiento de de aguas residuales de la Murtra (Gavà).
El 7 junio, la Guardia Civil recogió unas primeras muestras tras recibir la llamada de dos vecinos que durante el primer día del desconfinamiento observaron peces muertos entre aguas grises y olores. El Ayuntamiento reconoció que el 23 de abril una rotura de una tubería había producido un grave vertido. El destrozo ambiental fue tan profundo que varios camiones cisterna tardaron días en recoger el derrame, según el testimonio de algunos agricultores citados por los vecinos.
Con su querella, el movimiento vecinal quiere demostrar que los vertidos no son hechos puntuales, sino que se llevan produciendo al menos desde 2012, año el que el director del ICFO, Lluís Torner, remitió una carta a la empresa metropolitana de saneamiento para quejarse de fuertes olores.
El momento de máximo tensión se produjo en junio, cuando el Ayuntamiento amenazó con sentar en el banquillo a la Generalitat si en un “corto periodo de tiempo” no ponía soluciones. El pasado miércoles, un día antes el que el operativo de la Benemérita recogía muestras, la Generalitat anunció una inversión de 5 millones para construir la anhelada estación de bombeo.
”Celebramos la investigación. Parece que la Fiscalía ha estimado nuestros pruebas de que existe delito ambiental. Ahora, esperamos que la ACA y la AMB inviertan”, explica Ramon Sanahuja, portavoz de Salvem l’Olla del Rei.