Frente común para frenar a la avispa asiática

Las cuatro diputaciones catalanas desarrollan una aplicación para supervisar la expansión de la agresiva especie invasora

Una abeja posada sobre una flor.Patrick Hendry
Tarragona -

La avispa asiática da muestras de quedarse, si nadie lo impide. Las cuatro diputaciones catalanas han activado una contraofensiva conjunta para detener el avance de esta especie invasora, a la que se atribuye un alto poder destructor para la flora y la fauna autóctonas. El plan de choque ha consistido en echar mano de la tecnología y desarrollar una aplicación, Sitmun-Avispa Asiática, que permite hacer un exhaustivo rastreo sobre la expansión de la ...

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La avispa asiática da muestras de quedarse, si nadie lo impide. Las cuatro diputaciones catalanas han activado una contraofensiva conjunta para detener el avance de esta especie invasora, a la que se atribuye un alto poder destructor para la flora y la fauna autóctonas. El plan de choque ha consistido en echar mano de la tecnología y desarrollar una aplicación, Sitmun-Avispa Asiática, que permite hacer un exhaustivo rastreo sobre la expansión de la Vespa velutina.

La herramienta da forma y orden a un sistema de registro de datos y recopila información territorial sobre la avispa invasora. La aplicación, impulsada por la Diputación de Barcelona en colaboración con los entes provinciales de Girona, Tarragona y Lleida, se pone a disposición de los ayuntamientos y de los consejos comarcales con el objetivo de potenciar y unificar la recogida de testimonios asociados a la detección de nidos.

Más información

La escasa información que se tiene de la avispa asiática ha condicionado los resultados de las estrategias que se han llevado a cabo para frenar su avance. Se cumplen ocho años desde que se conoció el primer caso de Vespa velutina nigrithorax en Cataluña. Se descubrió el 2012, cerca de Garriguella (Alt Empordà). Al poco se tuvo constancia de su presencia en la Garrotxa y, también, se detectó su poderoso zumbido en el Valle de Arán. Desde entonces, la expansión de esta especie exótica invasora ha sido mucho más veloz que la capacidad de reacción para detener su propagación. Los técnicos medioambientales ya valoran si, más allá de centrar los esfuerzos en mitigar la presencia, hay que poner el foco en medidas de gestión, de adaptación y de sensibilización para aprender a convivir con la avispa invasora. La app Sitmun-Avispa Asiática pretende monitorear la evolución de su presencia en el territorio y detectar si se acomoda en zonas donde pueda resultar potencialmente peligrosa. Las comarcas de Girona y Barcelona son las más afectadas.

La avispa asiática, que según varios estudios llegó desde China, engulle sobre todo abejas de la miel y, se calcula que puede llegar a tragarse de 25 a 50 abejas diarias, con lo que pone en serio riesgo a la especie y a los procesos de polinización.

Una investigación del Instituto de Biología Evolutiva (IBE-CSIC) en Barcelona avanzó hace unos meses haber hallado indicios acerca de que un ave rapaz, el abejero europeo (pernis apivorus) pueda actuar como depredador de la avispa asiática, lo que podría ser un valioso mecanismo de contención para mitigar su avance. A la espera de los efectos que pueda tener el apetito del abejero, las diputaciones catalanas se han puesto en manos de la tecnología.


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