Cataluña afronta otra semana cerrada a la espera del plan de desescalada

La velocidad de transmisión del virus cae y se reducen los contagios, pero persiste la presión asistencial sobre los hospitales

Barcelona -
Una sanitaria realiza un test PCR a una mujer de una residencia de Barcelona.Enric Fontcuberta (EFE)

La curva epidémica en Cataluña sigue a la baja, pero persisten las medidas restrictivas. Después de varias semanas con los contagios disparados, la comunidad se instala en una pendiente descendente de nuevas infecciones y continúa reduciéndose la velocidad de transmisión del virus (la Rt, que mide a cuántas personas contagia, de media, un positivo): está 0,78, por debajo de lo que exige la comunidad científica para mantener a raya la epidemia (menos de 1) e incluso inferior al objetivo que se había propuesto el Govern de alcanzar el 0,80. Con este parámetro en descenso, caen también los contag...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La curva epidémica en Cataluña sigue a la baja, pero persisten las medidas restrictivas. Después de varias semanas con los contagios disparados, la comunidad se instala en una pendiente descendente de nuevas infecciones y continúa reduciéndose la velocidad de transmisión del virus (la Rt, que mide a cuántas personas contagia, de media, un positivo): está 0,78, por debajo de lo que exige la comunidad científica para mantener a raya la epidemia (menos de 1) e incluso inferior al objetivo que se había propuesto el Govern de alcanzar el 0,80. Con este parámetro en descenso, caen también los contagios (1.100 notificados en 24 horas), pero el Govern mantiene una semana más las restricciones sociales y aspira a empezar la desescalada el próximo lunes, 23 de noviembre. No hay nada decidido, aunque el Departamento de Salud apunta a flexibilizar primero las actividades que se puedan hacer al aire libre. Esta semana, el Govern se sentará con los sectores económicos.

Más información

Con la mejora de los indicadores, Cataluña se acerca al objetivo impuesto por el Govern para iniciar la desescalada de medidas restrictivas: una Rt de 0,80, menos de 1.000 casos diarios y 300 personas en la UCI. El único parámetro que todavía está lejos de alcanzar es el de la presión hospitalaria, que sigue elevada: hay 2.535 personas ingresadas con covid-19, 587 en la UCI de hospitales públicos y privados. Con la presión de los sectores económicos tras de sí, Salud ya da por hecho que la desescalada, que previsiblemente arrancará el próximo lunes, se iniciará sin cumplir el objetivo de las UCI.

Por lo pronto, no obstante, Cataluña sigue inmersa en un escenario de fuertes restricciones sociales: confinamiento perimetral de la comunidad (intensificado por municipios los fines de semana), cierre total de la restauración y las actividades culturales y deportivas, aforos limitados en el comercio y toque de queda nocturno, entre otras medidas. Todo este paquete de limitaciones han servido para doblar la curva epidémica que amenazaba con poner en jaque otra vez la capacidad hospitalaria: el riesgo de rebrote, que mide el crecimiento potencial de la epidemia en la comunidad, se sitúa en 438 puntos, lejos de los 900 que alcanzó en la última semana de octubre pero todavía en situación de riesgo muy elevada. “Hemos superado el pico de la curva epidemiológica, pero no podemos decir lo mismo de la curva asistencial”, ha valorado la consejera de Salud, Alba Vergés.

Esta semana, el Govern aprovechará para ultimar con los sectores económicos afectados los detalles de la desescalada, que se hará por varios tramos, con una duración mínima de 15 días, según Vergés. “El lunes iniciaremos una apertura progresiva de actividades y hay que llegar en las mejores condiciones posibles. Prudencia. No podemos correr. El sistema sanitario puede verse perjudicado si no hacemos bien la reapertura de las actividades”, ha advertido la titular de Salud.

Vergés no ha querido concretar cuáles serán los primeros pasos de esa desescalada, aunque aseguró que no necesariamente habrá que modificar los horarios del toque de queda. “Es extremadamente importante ir con cuidado, no podemos tener mucha interacción social. La mayoría de actividades es mejor hacerlas con nuestras familias, no mezclarnos. No podemos pensar que lo podemos hacer como en verano de forma descontrolada”, ha avisado el coordinador de la Unidad de Seguimiento de la covid-19 en Cataluña, Jacobo Mendioroz.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Aunque la consejera de Salud evitó aclarar las medidas que se pondrán en marcha a partir de la semana que viene, la titular de Cultura, Àngels Ponsa, sí ha confirmado que el Govern estudia levantar las restricciones de movilidad entre municipios los fines de semana para poder acudir a eventos culturales. “Es uno de los temas que está incluido en el plan de reanudación, también lo consideramos”, ha dicho en una entrevista a RAC1. Ponsa también ha admitido que ella no hubiese cerrado los espacios culturales.

Intervenida una residencia

Por otra parte, el Departamento de Salud ha intervenido una residencia de ancianos en Canet de Mar tras detectar que la inmensa mayoría de los usuarios y la mitad de los profesionales están infectados por coronavirus. El cribado en la Llar de l’Hotel Maricel Tercera Edat de Canet reveló que 11 de los 20 profesionales dieron positivo y 40 de los 46 ancianos residentes también tienen covid-19.

De los residentes positivos, tres han sido hospitalizados con síntomas graves y seis han sido trasladados a la residencia Orpea de Girona “para bajar la presión asistencial y permitir una mejor sectorización”, ha explicado Salud en un comunicado. La empresa Suara Serveis SCCL se hará cargo de la residencia intervenida por la Generalitat.

Información sobre el coronavirus

- Aquí puede seguir la última hora sobre la evolución de la pandemia

- Así evoluciona la curva del coronavirus en el mundo

- Descárguese la aplicación de rastreo para España

- Guía de actuación ante la enfermedad

Sobre la firma

Archivado En