Conciliar sin extraescolares: 10 días de infarto en Andalucía para las familias de 90.000 alumnos
El retraso de la Junta deja a los colegios públicos sin estas actividades en el arranque de curso. El Gobierno autonómico espera recuperarlas en los próximos días
“La sensación es de abandono. No puedo trabajar las horas que debo y de momento en mi empresa me perdonan por la antigüedad y la confianza, pero no descarto que me descuenten de la nómina y es hasta lógico que pase. Tengo que salir del trabajo a las 15.30 y no puedo hacer una jornada laboral normal. Es una locura, todo el día corriendo, estamos todos atacados”. Silvia Martín, madre de dos niños de 8 y 12 años en Fuengirola (Málaga), lleva 10 días con la lengua fuera y sin perspectiva de que la situación mejore. El colegio El Tejar sigue sin clases extraescolares para sus alumnos y Martín, admi...
“La sensación es de abandono. No puedo trabajar las horas que debo y de momento en mi empresa me perdonan por la antigüedad y la confianza, pero no descarto que me descuenten de la nómina y es hasta lógico que pase. Tengo que salir del trabajo a las 15.30 y no puedo hacer una jornada laboral normal. Es una locura, todo el día corriendo, estamos todos atacados”. Silvia Martín, madre de dos niños de 8 y 12 años en Fuengirola (Málaga), lleva 10 días con la lengua fuera y sin perspectiva de que la situación mejore. El colegio El Tejar sigue sin clases extraescolares para sus alumnos y Martín, administrativa, aún no sabe cuándo recuperará su vida normal. El problema afecta a 90.800 estudiantes de los 1.667 colegios públicos de Andalucía, que han sufrido un accidentado inicio de curso en el que conciliar ha sido misión imposible.
La Junta de Andalucía (PP) asegura que el problema se resolverá en los próximos días, pero todos los colegios de la provincia de Málaga carecen de fecha -por estar pendiente de posibles recursos de empresas- y sus extraescolares siguen en el aire. La falta de planificación de la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, que ha pedido disculpas en un comunicado, es evidente, y al margen del agujero económico para las 104 empresas afectadas, las familias han sufrido complejos equilibrios horarios. “Han tenido que venir mi hermano y mi madre, con 71 años, desde Cádiz hasta Sevilla para recoger a mis hijos del colegio porque la chica que cuida de ellos no podía estas semanas. Lo peor es la falta de visibilidad y transparencia de la Junta para dar información clara al respecto”, se queja un padre que pide anonimato del colegio Maestra Isabel Álvarez en la capital andaluza.
Los padres se enteraron el viernes 29 de septiembre de que las extraescolares del lunes siguiente 2 de octubre no iban a comenzar según el calendario previsto, con el consiguiente problema de organización improvisada de horarios para combinar los empleos con la recogida de hijos, en un tetris cuesta arriba. La Junta ha comunicado este martes que los 1.800 contratos estarían firmados este miércoles, pero al ser el jueves fiesta, la mayoría de actividades comenzarán el próximo lunes, confirman las empresas que contratan a los monitores desplazados a los colegios.
“Estamos escandalizados, vamos a ciegas y tenemos una sensación de improvisación por parte de la Junta. Nos lanzan a que arranquemos unas actividades que requieren una planificación, con menores de tres años incluso. Llevamos desde el 1 de septiembre enviando mensajes a la consejería de que no llegábamos a tiempo y sin reuniones presenciales, nos enteramos de los tiempos por la prensa. ¿En qué manos estamos?”, interroga Beatriz Talaverón, gerente de la Asociación Andaluza de Empresas Educativas Culturales y de Ocio (AAEECO), la patronal que ofrece estas actividades.
El colegio sevillano José María del Campo arrancará sus clases de inglés, deporte, kárate, robótica y teatro el próximo lunes, aunque con la incertidumbre de no saber con cuántos alumnos contará cada actividad, ya que muchos padres y madres han buscado alternativas urgentes para poder conciliar estas dos semanas. “Las familias estaban inquietas y nos han llegado dudas constantes, aunque no teníamos respuestas certeras por falta de información”, explica su directora Sonsoles Salazar.
La empresa Educasport, encargada de ofrecer las clases, recibió este miércoles por la mañana la confirmación de la consejería para firmar el contrato para este colegio y otros 54 centros. Jerónimo Rodríguez, su responsable, busca ahora monitores para contratar a contrarreloj porque ha perdido a varios que han buscado otros trabajos, ante la incertidumbre laboral generada. Rodríguez ha pagado seguros sociales, sueldos de monitores, infraestructura y materiales sin tener los contratos firmados con la Junta. “¿La Administración pedir perdón? Nada de nada. Empezamos tarde por una enorme falta de previsión, a pesar de que ya sucedió en 2018. Ahora estoy buscando como loco nuevos monitores y cuando llegue el lunes veremos a cuántas familias nos encontramos, porque muchos habrán buscando alternativas”, lamenta.
Las clases extraescolares son unas actividades al alza, y de 72.000 alumnos el año pasado se ha pasado a 90.800 este curso, un 22% más. Las extraescolares se instituyeron en Andalucía como un derecho para favorecer la conciliación familiar para la comunidad educativa hace 21 años gracias al decreto 137/2002 de apoyo a las familias. La norma incluía también las aulas matinales -antes de comenzar las clases, de 8.00 a 9.00- y el servicio de comedor para que los alumnos almuercen en los centros. En 2018, con un Gobierno socialista, también se alertó de un problema similar con amenaza de retraso generalizado, pero las empresas solicitaron un contrato puente temporal para poder comenzar a principios de octubre, y la Junta lo concedió.
En esta ocasión el Ejecutivo autónomo alega que era necesario renovar el acuerdo marco con las 104 empresas -al igual que en 2018- y que por primera vez los 1.800 contratos debían hacerse a través de la plataforma Giro, “un procedimiento más lento, nuevo y menos ágil”, alega un portavoz de la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional. ¿Por qué no se actuó antes? “No estaba previsto que el procedimiento fuera tan lento”, añade.
De momento, los colegios malagueños no tienen fecha para recuperar su pulso normal. “En la provincia de Málaga, dado que el lote correspondiente a la misma fue recurrido, el proceso se demorará algo más que en el resto de Andalucía, si bien se están poniendo todos los esfuerzos para agilizar los trámites y culminarlos lo antes posible”, indica el comunicado de la Junta.
Pedro Ayala, director de la asociación de directores de colegios públicos andaluces Asadipre, confirma que el trastorno organizativo ha calado: “Es una situación anómala para las familias, que han pedido explicaciones y han tenido un desasosiego. Las clases tienen sus horarios y querían saber si debían apuntar a sus hijos en otras actividades para salir adelante”. En paralelo, Talaverón reclama que la Junta aprenda del caos generado para que al menos no se repita en el futuro. “Ha habido dejadez y falta de planificación, pero también falta de empatía por la poca importancia dada a la conciliación, a pesar de que llevamos 21 años prestando el servicio y la Junta sabe desde junio las familias que lo piden”.