Las imágenes del reservado y la factura de Carlos Mazón y Maribel Vilaplana en El Ventorro del día de la dana: 165 euros
El ‘president’ y la periodista degustaron “dos menús concertados”, según el comprobante aportado por el dueño del restaurante a la jueza que investiga la tragedia
El presidente de la Generalitat Valenciana en funciones, Carlos Mazón, y la periodista Maribel Vilaplana degustaron “dos menús concertados” en el restaurante El Ventorro el día de la dana que dejó 229 muertos el 29 de octubre de 2024. La cuenta del ágape ascendió a 165 euros, según la factura aportada a la jueza de Catarroja (Valencia) que indaga la riada, Nuria Ruiz Tobarra, por el propietario del establecimiento, Alfredo Romero.
El documento confirma que el almuerzo fue costeado por el PP de Valencia y que los clientes se sentaron en la mesa 106 de la céntrica casa de comidas. El comprobante, sin embargo, no detalla las bebidas ni los platos que degustaron Mazón y Vilaplana. Tampoco precisa la hora de emisión de la factura.
El restaurador aseguró que sus clientes pidieron un menú cerrado. Y que la comida incluyó una botella de vino, “probablemente una caña inicial” y varias botellas de agua, según desveló el empresario el pasado viernes en el juzgado de Catarroja, donde compareció como testigo, una condición que le obligaba a decir la verdad. Romero explicó también que la reserva se hizo por teléfono desde la Generalitat “dos días antes”.
Tras trascender la celebración de la comida, el entorno de Vilaplana aseguró que la informadora y el president hablaron “con dos copas de vino” y “una botella sobre la mesa”. Matizó que “no hubo gin-tonics” y que optaron por pedir para el centro (de la mesa) entrantes: un plato de tomate con ventresca y setas de temporada, café y tarta para compartir. Se trata de una comanda que choca con el término reflejado en el comprobante aportado por el restaurador al juzgado, que recoge “dos menús concertados: 165 euros”.
El restaurador también ha entregado a la jueza un plano del reservado donde almorzaron sus clientes. Se trata de un espacio de forma irregular, de unos tres metros de ancho en su lado más estrecho y 4,8 en su lado más largo que —según Romero— tiene capacidad para cinco comensales. El lugar, de unos 16 metros cuadrados, acogió la comida de casi cuatro horas (15.00-18.45) que Vilaplana y Mazón celebraron mientras se inundaba parte de la provincia de Valencia. Un almuerzo que se prolongó tras los desbordamientos del río Magro, que desató el caos en Utiel y Requena, y del barranco del Poyo a la altura de Chiva y Cheste, donde nace la rambla.
La jueza de la dana decidió esta semana pedir la factura y el plano del reservado tras tomar declaración el pasado viernes al dueño de El Ventorro. Romero expuso que la comida acabó a las 17.00, que Mazón y Vilaplana extendieron su sobremesa hasta las 18.45 horas. Y que abandonaron el local “no más tarde” de las 19.00 horas. Tras salir de la casa de comidas, ambos se desplazaron hasta un céntrico aparcamiento, en la plaza Tetuán de Valencia, donde ella retiró su vehículo una hora después.
La instructora solicitó también la imagen del reservado del restaurante con el argumento de que resulta clave para analizar si Vilaplana pudo escuchar las conversaciones de Mazón sobre la crisis. El jefe del Consell hizo o recibió ocho llamadas entre las 17.37 y las 18.30 horas desde la casa de comidas con personalidades como la entonces consejera de Justicia e Interior y principal imputada en la causa, Salomé Pradas, o el presidente de la Diputación de Valencia, el popular Vicente Mompó.
La petición de la factura —según la jueza— responde a la necesidad de conocer “la extensión del ágape”.
A raíz de iniciar la investigación sobre el almuerzo, que arrancó después de que la Audiencia Provincial de Valencia diera luz verde a tomar declaración a Vilaplana, la instructora citó a los escoltas, al chófer y seis altos cargos de Mazón, entre los que figura el sucesor del barón popular y secretario general del PP de Valencia, Juanfran Pérez Llorca, que desfiló por el juzgado de Catarroja como testigo el pasado viernes.
Vilaplana dejó su coche en el garaje a las 14.38
La jueza de Catarroja maneja un documento, al que ha tenido acceso este diario, que revela que el día de la dana Vilaplana estacionó su coche en el aparcamiento de la plaza Tetuán de Valencia, a las 14.38 horas, y entró por la “entrada 1” del subterráneo. La periodista retiró su vehículo a las 19.51 tras pagar en el cajero 2 del garaje a las 19.48 horas. El tique sumó 15,10 euros.
La hora de salida del garaje confirma que Mazón pudo llegar al Palau de la Generalitat sobre las 20.00 horas. Se trata de 11 minutos antes de que la administración autonómica enviara la alerta masiva a móviles para informar a la población de la magnitud de la tragedia. La notificación entró en los teléfonos cuando la mayoría de los desaparecidos ya había muerto. Tras el Palau, el presidente puso rumbo a L’Eliana (Valencia), sede del Cecopi, el órgano que coordinó la crisis, donde llegó a las 20.28 horas.