Cuca Gamarra tilda la foto de Sánchez con Bildu como “la imagen de la indignidad y de lo más bajo que se puede caer en política”

Para el Partido Popular, Pedro Sánchez ha caído este viernes en lo “más bajo” de la “política española”. Así ha calificado la portavoz del PP, Cuca Gamarra, la primera reunión mantenida entre el presidente en funciones y los representantes de EH Bildu. Un encuentro que se ha producido al final de la ronda de contactos como candidato a la investidura y en el que la formación abertzale no ha pedido contrapa...

Para el Partido Popular, Pedro Sánchez ha caído este viernes en lo “más bajo” de la “política española”. Así ha calificado la portavoz del PP, Cuca Gamarra, la primera reunión mantenida entre el presidente en funciones y los representantes de EH Bildu. Un encuentro que se ha producido al final de la ronda de contactos como candidato a la investidura y en el que la formación abertzale no ha pedido contrapartidas al secretario general del PSOE para dar su voto a favor, confirmado ya con anterioridad. “Vemos cómo Pedro Sánchez marca en el calendario otro día negro para la democracia en España. Uno de esos días que los demócratas pensábamos que no llegaríamos a vivir. La foto de hoy es la imagen de la indignidad”, ha censurado Gamarra en conferencia de prensa desde Logroño. En paralelo, los perfiles oficiales del Partido Popular en redes sociales y otros dirigentes también han cargado contra la instantánea. “El pacto de Pedro Sánchez con Bildu es el pacto de la vergüenza. Ningún presidente debería hablar con quienes se niegan a colaborar para esclarecer los crímenes del terrorismo”, ha escrito el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en la red social X (antes Twitter).

En la hemeroteca del PP hay otra fotografía de un dirigente popular con una representante de EH Bildu. Fue en otra ronda de contactos, tras las elecciones municipales del 24 de mayo de 2015, orientada a la formación del Gobierno local de la alcaldía de Vitoria. El ahora senador popular y vicepresidente de la Cámara alta, Javier Maroto, aspiraba entonces a revalidar el cargo como regidor de la capital alavesa. Recibió en su despacho a Miren Larrion, número uno por EH Bildu, a quien estrechó la mano y de quien consideró que era la indicada para “liderar la oposición en los próximos cuatro años”, a tenor de los resultados, como “algo nuevo y sorprendente en la ciudad”, según publicó EITB.

En esta ocasión, la reunión ha tenido lugar entre Sánchez y la portavoz parlamentaria en el Congreso de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, y de su portavoz en el Senado, Gorka Elejabarrieta. Y en la jornada final de la ronda de contactos, la más compleja para el presidente en funciones tanto por el simbolismo de su foto con la formación abertzale como por el posterior encuentro con la representante de Junts, Miriam Nogueras. “Nunca un gobernante en ninguna democracia europea ha llegado tan bajo por mantenerse en el poder”, ha reiterado Gamarra, que ha criticado duramente al presidente en funciones por entrevistarte con Aizpurua “condenada” en el pasado por “apología del terrorismo” y por no haber exigido, durante la reunión, a sendos representantes de EH Bildu que condenasen el terrorismo, colaborasen con el esclarecimiento de los delitos cometidos por ETA aún por resolver ni que rechazasen los ongi etorri.

El 13 de julio del año pasado, en la tribuna del Congreso, Aizpurua reprodujo casi exactamente las palabras que pronunció Arnaldo Otegi, coordinador general de la formación abertzale, el 18 de octubre de 2021 en San Sebastián, en lo que supuso el primer reconocimiento expreso de la izquierda abertzale del daño causado a las víctimas de ETA. “Sentimos su dolor, y desde ese sentimiento sincero afirmamos que el mismo nunca debió haberse producido, que a nadie puede satisfacer que todo aquello sucediera, ni que se hubiera prolongado tanto en el tiempo”, dijo Aizpurua en el hemiciclo. Tras la reunión con Sánchez, EH Bildu ha explicado que votará a favor de su investidura porque “la lectura que realiza la izquierda independentista vasca” del resultado de las elecciones del 23-J es que “por encima de siglas políticas, la inmensa mayoría del pueblo vasco envió un mandato claro: no permitir que el bloque reaccionario, liderado por PP-VOX, conformara gobierno en el Estado español”.

Por su parte, Gamarra ha incidido asimismo en la “vergüenza” que supone el encuentro de Sánchez con EH Bildu recordando que la formación abertzale colocó a más de 40 condenados por ETA en las listas de las elecciones municipales del pasado 28 de mayo. Un hecho que el presidente en funciones calificó entonces de “legal”, pero “no decente”. Para la portavoz del PP, el paso dado hoy por Sánchez supone además el “blanqueamiento indecente de Bildu” y ha censurado que Sánchez dijo que “nunca pactaría” con la formación abertzale y ahora lo hace.

Abucheos

Sobre los abucheos durante la Fiesta Nacional a Sánchez, en los que se escuchó “¡que te vote Txapote!” —en alusión a Francisco Javier García Gaztelu, el etarra que mató a Miguel Ángel Blanco y cuyo alias convirtieron sectores de la derecha en arma arrojadiza durante la campaña electoral del 23-J, pese a los ruegos de víctimas del terrorismo para que no lo hicieran—, Gamarra ha respondido a las acusaciones de Sánchez, quien entiende que el PP alienta este tipo de actitudes. “Es el colmo. Es cuanto menos curioso que mientras vierte estas acusaciones no sea capaz de pedir a Bildu que cese los ongi etorri. Debería dejar de acusar a un partido como el PP, que es un partido serio y responsable”, ha finalizado.

Del otro lado, la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, ha criticado este viernes a quienes abuchearon al presidente alegando que “hay otros lugares para hacerlo” y que su actitud supone una “falta de respeto institucional " hacia el Rey, las Fuerzas Armadas y todos los ciudadanos que acudieron a ver el desfile. “Si alguien considera que quiere hacer una crítica política a quien sea, hay otros lugares para hacerlo. Se descalifican por sí solos, no es el lugar adecuado”, ha subrayado, sin disimular su indignación. Robles también a criticado al Partido Popular, sin citarlo, señalando que las fuerzas políticas “que tienen cierta tolerancia con los que vierten estas expresiones hacen un flaco favor a España”. “Cuando alguien por silencio o tolerancia no critica contundentemente esos insultos es evidente que no está ayudando a poner en valor España”, ha dicho, informa Miguel González.