Los secretarios provinciales del PSOE se vuelcan con Sánchez para que forme un Gobierno “de progreso y convivencia”
El expresidente Rodríguez Zapatero encabeza el manifiesto, al que se puede adherir cualquier ciudadano, en respaldo de la candidatura del actual presidente en funciones
Segunda demostración de fuerza del PSOE y de respaldo sin fisuras a Pedro Sánchez por segundo día consecutivo tras la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo. Todos los líderes provinciales socialistas, sin excepción de ningún territorio, han suscrito un manifiesto encabezado por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en apoyo del secretario general y presidente del Gobierno en funciones para que forme un Gobierno “de progreso y convivencia”. El mensaje es rot...
Segunda demostración de fuerza del PSOE y de respaldo sin fisuras a Pedro Sánchez por segundo día consecutivo tras la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo. Todos los líderes provinciales socialistas, sin excepción de ningún territorio, han suscrito un manifiesto encabezado por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero en apoyo del secretario general y presidente del Gobierno en funciones para que forme un Gobierno “de progreso y convivencia”. El mensaje es rotundo: Sánchez, que previsiblemente recibirá este martes el encargo de intentar la investidura del Rey Felipe VI, cuenta con el aval de los 72 secretarios provinciales e insulares del PSOE, sus equivalentes del partido hermano del PSC y líderes de las federaciones uniprovinciales socialistas. Un patriotismo de partido con el que Ferraz, y por extensión La Moncloa, pretende proteger a Sánchez de las críticas de la derecha, pero sobre todo de las realizadas por los dirigentes históricos Felipe González y Alfonso Guerra, en unas semanas en las que la presión sobre el PSOE será enorme a cuenta de las condiciones de la amnistía a los encausados del procés que ERC y Junts exigen a cambio de permitir la investidura de Sánchez.
“Afrontamos esta nueva etapa con plena ilusión y determinación (...) La expresión de las urnas ha sido clara. No al señor Feijóo. Así ha quedado constatado en el Parlamento y el compromiso del PSOE es formar un Gobierno de progreso con Sumar para revalidar los acuerdos que tan buenos resultados dieron en la pasada legislatura y que fueron refrendados el 23-J”, recoge el manifiesto, al que se puede adherir cualquier ciudadano sin tener que ser militante socialista.
Los cuadros del PSOE y del PSC lo han presentado en la Escuela Julián Besteiro de la UGT en Madrid, un día después del acto de Sánchez con más de 3.000 militantes y simpatizantes en La Rinconada (Sevilla), en el corazón del socialismo andaluz, donde el desmarque con las críticas de González y Guerra fue rotundo. “Ser socialista es tener opinión diferente, ser controvertido, tener puntos de vista diversos, pero ser socialistas es ante todo ser humildes y leales y tener respeto y consideración a nuestro secretario general. Eso no se puede perder nunca porque todos somos iguales, no hay militantes A y militantes B. Todos somos iguales”, sentenció el secretario provincial, Javier Fernández de los Ríos.
“Este manifiesto nace de la convicción de los principios y del compromiso de todos nosotros con nuestros compañeros y nuestros votantes. España necesita un gobierno progresista, que dialogue, que avance en derechos sociales y en prosperidad. Esto no es un proyecto individual, estamos en un proyecto colectivo que representa a muchas personas, un proyecto político de aliento largo y con unas raíces históricas de más de 144 años de largo”, ha remarcado este domingo Javier Cendón, secretario provincial de León. “Estamos aquí porque es lo que la militancia quiere: unidad de acción. En los últimos días, la derecha ha utilizado todo tipo de estrategias, y por eso este es un manifiesto de apoyo para que Pedro Sánchez vaya a la investidura con el apoyo firme del PSOE”, le ha precedido el secretario provincial de Badajoz, Rafael Lemus.
El área de organización del PSOE ha dedicado varios días a cuadrar las agendas de los secretarios provinciales para que la mayoría acudiese al acto. La fecha escogida para el último cierre de filas con Sánchez no podía haber sido más simbólico: ha coincidido con el sexto aniversario de la declaración unilateral de independencia del 1 de octubre de 2017, con los socialistas intentando reconducir la relación con ERC y Junts y que renuncien a su petición, imposible para el PSOE, de establecer las condiciones para celebrar un referéndum de autodeterminación. Y sobre todo, justo un año antes del 1-O y del procés, Sánchez dimitió como secretario general del PSOE tras el convulso comité federal en el que se negó a facilitar la investidura de Mariano Rajoy; siete meses después, regresó a Ferraz tras ganar las primarias a lomos de la militancia frente a Susana Díaz, la favorita del establishment. “Todos los que estamos aquí representamos a la militancia socialista de España, una militancia más fuerte, más unida y con más argumentos, que sabe que tenemos un proyecto de país en el que cabemos todos y en el que vamos a seguir por más derechos sociales, una España europeísta y más feminista. Desde aquí damos nuestro apoyo, fuerza y compromiso a nuestro secretario general”, ha refrendado la secretaria general del PSOE de Huelva, Maru Limón. Entre los asistentes también estaban los secretarios de organización de Asturias y Navarra, cuyos presidentes, Adrián Barbón y María Chivite también suscriben el manifiesto. El otro presidente autonómico que tiene el PSOE, el castellanomanchego Emiliano García-Page, crítico con la amnistía, ha estado representado por su número dos, Sergio Gutiérrez.
La firma, en primer lugar, de Rodríguez Zapatero, que desempeñó un papel crucial desde la precampaña del 23-J inyectando la moral perdida tras el desastre electoral del 28-M, contrasta con la ausencia de González, al que en el PSOE reprochan el silencio que mantuvo en la campaña de las últimas generales y sobre los pactos del PP y Vox en comunidades autónomas y ayuntamientos. “Hoy España cuenta con una mayoría para avanzar en un proyecto de progreso y convivencia. PP y Vox pidieron el voto para derogar la obra de un Gobierno progresista con una estrategia basada exclusivamente en el insulto y la mentira. Una apuesta que fracasó el 23 de julio. Si PP y Vox hubieran tenido los votos suficientes, hoy España tendría un gobierno de la derecha y la ultraderecha. Exactamente igual que ha ocurrido en todas las comunidades y ayuntamientos donde han sumado, aunque el PSOE fuera la fuerza más votada en muchos de ellos”, incide el escrito.
En previsión de las críticas que dan por hecha la amnistía, el manifiesto vincula la historia del PSOE y del PSC con “la historia del servicio democrático a España” y las conquistas sociales “para vivir juntos con el mejor espíritu constitucional”. “Para nuestro partido, la España democrática es la España que se puede reconciliar con todos, con todas y todos”, finaliza con otro guiño a la distensión de la crisis política y territorial pendiente de resolver en Cataluña.