Margarita Robles replica a Podemos que “invertir en Defensa es invertir en la paz”

La ministra Margarita Robles ha salido este martes al paso de quienes critican el anunciado aumento del gasto militar —entre ellos, la mayoría de los socios del Gobierno— asegurando que “invertir en Defensa es invertir en la paz”. Sin aludir a Podemos, que ha señalado que hay gastos más prioritarios, la titular de Defensa ha subrayado que “la necesidad más acuciante para cualquier ser humano es la paz. La paz es la condición previa e indispensable para poder desarrollar cualquier otro derecho”.

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La ministra Margarita Robles ha salido este martes al paso de quienes critican el anunciado aumento del gasto militar —entre ellos, la mayoría de los socios del Gobierno— asegurando que “invertir en Defensa es invertir en la paz”. Sin aludir a Podemos, que ha señalado que hay gastos más prioritarios, la titular de Defensa ha subrayado que “la necesidad más acuciante para cualquier ser humano es la paz. La paz es la condición previa e indispensable para poder desarrollar cualquier otro derecho”.

La ministra se ha mostrado sorprendida de que se cuestione el aumento del gasto militar “en un momento tan dramático como el que estamos viviendo, con un drama de la magnitud del de Ucrania, con casi cinco millones de personas tratando de abandonar su país, con bombardeos indiscriminados a los que tratan de salir por los corredores humanitarios”.

La invasión rusa ha servido a Robles para advertir de que “la paz está seriamente comprometida en Europa”, pues no se trata solo del ataque a un país sino a toda la comunidad internacional. Y ha añadido que “apostar por la paz es estar preparados para combatir lo que está sucediendo desde el punto de vista humanitario”. Eludiendo referirse directamente a nadie, ha criticado a quienes hablan desde la comodidad de sus despachos y “se olvidan de que estamos en una guerra. Es el momento de un compromiso serio”, ha apostillado la ministra, tras entregar el premio Soldado Idoia Rodríguez, ―llamado así en homenaje a la primera militar española muerta en 2007 en una misión internacional― a la capitán enfermera Amanda García Oliva.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, expresó el pasado lunes, en una entrevista en La Sexta, su propósito de “aumentar el gasto en Defensa y plantear un horizonte en los próximos años para poder cumplir con ese mandato de la OTAN del 2% en Defensa”. El viernes pasado, tras la cumbre europea de Versalles (Francia), ya se había comprometido a aumentar el gasto militar hasta el 1,22 o 1,24% del PIB al finalizar la legislatura, en 2024. En su entrevista televisiva, el presidente se lio con los porcentajes, al asegurar que, cuando llegó al Gobierno en 2018, España gastaba 1,25% del PIB en Defensa y ahora llega hasta el 1,40%. En realidad, según datos oficiales de la OTAN, España destina el 1,02% de su riqueza nacional al gasto militar, el porcentaje más bajo de la Alianza Atlántica, con la excepción de Luxemburgo.

Los países miembros de la OTAN acordaron en la Cumbre de Gales, en 2014, tras la anexión de Crimea por parte de Rusia, elevar su presupuesto de Defensa, en el plazo de una década, marcándose como objetivo el 2% del PIB. No fue, por tanto, un “mandato”, sino un compromiso en términos más o menos vagos. Hace solo una semana, durante su comparecencia en la Comisión de Defensa del Congreso, Robles aseguró: “Nunca llegaremos al 2% [en gasto militar], como la inmensa mayoría de los países”. Sin embargo, la invasión de Ucrania ha cambiado radicalmente el panorama en Europa y países como Alemania, Dinamarca y Suecia, que estaban lejos del 2%, han anunciado su propósito de alcanzarlo a corto o medio plazo. En realidad, el “horizonte” de gasto que Sánchez quiere pactar con otros partidos políticos es una exigencia de la OTAN: la Alianza Atlántica, que celebra su próxima cumbre el 29 y 30 de junio en Madrid, ha pedido a los países que todavía no llegan al 2% que le presenten un plan en el que detallen cuándo y cómo piensan alcanzarlo.