El Gobierno pone el foco en los problemas territoriales relegados por Cataluña
Guiño al interior de España con la nueva ministra de Política Territorial
La crisis enquistada desde hace años en Cataluña es el principal problema político de España, pero Pedro Sánchez no quiere que invisibilice las dificultades, algunas singulares, en el resto del país. El Gobierno quiere remarcar en los dos años que restan de legislatura el mensaje de que también se preocupa por los problemas del resto de comunidades, aunque uno de los hitos de los próximos meses sea la mesa de diálogo con el Govern. ...
La crisis enquistada desde hace años en Cataluña es el principal problema político de España, pero Pedro Sánchez no quiere que invisibilice las dificultades, algunas singulares, en el resto del país. El Gobierno quiere remarcar en los dos años que restan de legislatura el mensaje de que también se preocupa por los problemas del resto de comunidades, aunque uno de los hitos de los próximos meses sea la mesa de diálogo con el Govern. La primera reunión se ha fijado para después de la Diada. A Sánchez le gustaría que se abordasen cuestiones concretas económicas y sociales. Pero la agenda de ERC y Junts es maximalista: amnistía y referéndum pactado. Dos peticiones que el PSOE rechaza.
En este contexto, la elección de Isabel Rodríguez, que este domingo renunció como alcaldesa de Puertollano (Ciudad Real), como nueva ministra de Política Territorial es la respuesta del Gobierno a las demandas de más atención de otras autonomías. La despoblación que afecta al interior peninsular, con el impacto añadido en la sostenibilidad de los servicios públicos, y la igualdad de oportunidades con independencia de en qué parte de España se viva es uno de los retos que más están poniendo a prueba la cohesión territorial. Y su solución, a corto y medio plazo, parece igual de complicada que el conflicto catalán. Unas inquietudes que a Rodríguez, que nació en 1981 en Abenójar, un municipio de 1.500 habitantes de Ciudad Real, no le resultan extrañas.
En su despedida de la alcaldía, en un pleno que se celebró este domingo de urgencia, Rodríguez se comprometió a trabajar por “la igualdad y la convivencia”. Fue otro guiño a los desequilibrios territoriales. Hubo más. La sucesora de Miquel Iceta avanzó que deja la alcaldía “para servir a España” sin perder la perspectiva municipalista. “Puertollano representa lo mejor de una España que no se rinde. Demostramos nuestra mejor versión en los momentos más duros”, subrayó.
La declaración de intenciones de Rodríguez, que compaginará el ministerio con la portavocía del Gobierno, apunta cuál va a ser una de las prioridades de La Moncloa los dos años que quedan por delante antes de las elecciones autonómicas, municipales y generales de 2023. La atención a los demás territorios será una de las máximas del Gobierno, donde han tomado nota del desgaste por la concesión de los indultos a los presos del procés. El Ejecutivo confía en que la gestión de los fondos europeos y el crecimiento de la economía deberían permitirle recuperar terreno entre los votantes. “La recuperación alcanzará todas sus metas si se abre paso un ambiente de diálogo social y de concordia territorial para asumir todos los retos que tenemos por delante y para sumar a todos a la recuperación económica y social y a la construcción de una España mejor”, dijo Sánchez en la declaración institucional en la que anunció la nueva configuración del Ejecutivo.
El nombramiento de Rodríguez en lugar del primer secretario del PSC refuerza, además, la idea de Sánchez de no vincular en esta próxima fase de la legislatura la política territorial con Cataluña. De los tres predecesores de la ministra castellano-manchega, dos eran catalanes (Meritxel Batet e Iceta) y una canaria (Carolina Darias). Otro motivo que se ha tenido en cuenta es que el PSC asumía la cartera de Transportes, una de las más importantes. De ahí el paso de Iceta a Cultura.