El PSOE y Ciudadanos pactan dos mociones para echar al PP del Gobierno de Murcia y el Ayuntamiento de la capital
Los socialistas señalan que el acuerdo no implica a otras comunidades pero el cambio de Cs es radical
Sacudida en el poder autonómico. El PSOE y Ciudadanos han presentado una moción de censura en Murcia para desbancar a los populares de los gobiernos regional y local. El pacto implica que Ciudadanos presidirá el Ejecutivo de la comunidad autónoma, mientras los socialistas se harán con el Ayuntamiento de la ciudad de Murcia. Ana Martínez Vidal, hasta ahora consejera de Empresa y portavoz, será la candidata a presidir el Gobierno murciano, y José Antonio Serrano, el portavoz socialista y concejal, el candidato a alcalde de Murcia. PSOE y Cs se bastan solos con sus votos para gobernar en la comun...
Sacudida en el poder autonómico. El PSOE y Ciudadanos han presentado una moción de censura en Murcia para desbancar a los populares de los gobiernos regional y local. El pacto implica que Ciudadanos presidirá el Ejecutivo de la comunidad autónoma, mientras los socialistas se harán con el Ayuntamiento de la ciudad de Murcia. Ana Martínez Vidal, hasta ahora consejera de Empresa y portavoz, será la candidata a presidir el Gobierno murciano, y José Antonio Serrano, el portavoz socialista y concejal, el candidato a alcalde de Murcia. PSOE y Cs se bastan solos con sus votos para gobernar en la comunidad, porque suman 23 de los 45 escaños de la Asamblea de Murcia, con lo que tienen mayoría absoluta para sacarla adelante, pero en el Ayuntamiento necesitan el apoyo de Unidas Podemos para que prospere la moción, que ha confirmado su respaldo.
Fuentes socialistas y de Ciudadanos señalan que el acuerdo se limita a Murcia, porque la situación política allí era “insostenible” después de varios enfrentamientos en las últimas semanas. Estas fuentes señalan que “no hay un pacto global” con Ciudadanos y por tanto este movimiento no tiene por qué tener consecuencias en Castilla y León o Madrid, dos comunidades donde los rumores de posibles mociones de censura para desbancar al PP son constantes.
Los socialistas explican que el caso murciano es especial, por el deterioro político que se había producido allí por las tensiones con Vox, pero lo cierto es que esta decisión supone un giro radical para Ciudadanos, que en 2019 decidió no pactar ninguna comunidad ni Ayuntamiento importante con el PSOE, a pesar de que podría haber logrado la presidencia o la alcaldía, y elegir como socio estable al PP. La decisión de echar del poder a los populares en la tierra del secretario general de este partido, Teodoro García Egea, tendrá sin duda consecuencias en la política nacional. El revuelo en los pasillos del Congreso y la evidente satisfacción de los socialistas era una prueba evidente de que este giro no tiene solo consecuencias locales.
El pacto se viene fraguando en múltiples conversaciones entre los representantes del PSOE y de Cs en la comunidad en las últimas semanas pero también ha habido contactos al máximo nivel entre las direcciones nacionales, según fuentes socialistas. En los pasillos del Congreso, Inés Arrimadas no ha querido hacer comentarios y ha remitido a las explicaciones de los dirigentes murcianos de Cs. José Luis Ábalos, secretario de organización del PSOE, explicará los detalles en rueda de prensa, pero su satisfacción era muy evidente, como la de Adriana Lastra, número dos del partido. Por el contrario, Santiago Abascal, líder de Vox, que parecía claramente molesto tras conocer la noticia, lanzó después un mensaje en Twitter en el que reclama a los presidentes del PP de Madrid, Andalucía y Castilla y León que convoquen rápidamente elecciones anticipadas para evitar las posibles mociones de censura en estas comunidades. “Exigimos elecciones en las autonomías que están en riesgo de ser asaltadas por el socialismo”, señala el líder de Vox.
El acuerdo se cocinó en absoluto secreto entre socialistas y Ciudadanos para evitar que el presidente murciano, Fernando López Miras, pudiera adelantar las elecciones e impedirlo. Según el Estatuto de Murcia, una vez registrada una moción de censura el presidente ya no puede disolver la Asamblea murciana para convocar elecciones, como figura en el artículo 27. El PP sí tiene en su mano adelantar la fecha electoral en Madrid, Castilla y León y Andalucía para evitar nuevas mociones, como ha sucedido en Madrid, por decisión de Isabel Díaz Ayuso. Los presidentes de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y Andalucía, Juanma Moreno, descartan sin embargo seguir el mismo camino que la presidenta madrileña, y no adelantarán las elecciones.
El popular Fernando López Miras fue designado en julio de 2019 presidente de la comunidad autónoma con los votos favorables del PP (16), Ciudadanos (6) y Vox (4) y gobierna en coalición con Ciudadanos. El candidato socialista Diego Conesa ganó las elecciones y obtuvo 17 diputados en las elecciones autonómicas del 26-M. Ahora, el partido de Arrimadas se hará con la presidencia, si como todo indica prospera la moción, a pesar de que cuenta con solo seis escaños de los 45 de la Asamblea murciana. José Ballesta (PP) es actualmente el alcalde de Murcia gracias a un pacto con Cs.
Ciudadanos también asegura, como el PSOE, que este movimiento es “puntual” y no se va a extender a otras comunidades autónomas, según fuentes oficiales. El partido de Inés Arrimadas cogobierna con los populares también en Madrid, en Andalucía y en Castilla y León, además del Ayuntamiento de la capital. Solo en Castilla y León la situación es similar a la de Murcia, en el sentido de que el PSOE y Cs suman juntos escaños suficientes para gobernar sin la necesidad del apoyo externo de otros partidos.
El partido de Inés Arrimadas empezó a sopesar la moción de censura a raíz de la polémica por la vacunación irregular del consejero dimisionario Manuel Villegas, y de alrededor de 400 funcionarios y altos cargos del Servicio Murciano de Salud que desempeñaban cargos no asistenciales. La disposición del presidente murciano del PP, Fernando López Miras, a aprobar el veto parental (la obligación de los padres a autorizar de manera previa y expresa, la asistencia de sus hijos a cualquier actividad que se desarrolle en el centro educativo), exigido por Vox a cambio de sus votos favorables a los presupuestos, terminó por tensar la cuerda.
Diego Conesa, portavoz socialista en el Parlamento murciano y secretario general del partido en la región, recuerda que su partido ganó las elecciones en 2019. “Desde el principio, hicimos un ofrecimiento a Ciudadanos para auparles en el Ayuntamiento de Murcia si ellos nos apoyaban en la región, pero no fue posible”, señala el dirigente del PSOE a este periódico. Conesa considera que hay dos hechos clave que podrían explicar el cambio de Ciudadanos: primero, la gestión de la vacunación en Murcia con el “tremendo escándalo” de las dosis administradas a centenares de altos cargos y funcionarios, y la aprobación del veto parental que exige Vox para apoyar los presupuestos de este año. El dirigente socialista incide en que lo más importante es acabar con “la red clientelar del PP después de 26 años en el poder”. “Hemos sido generosos porque lo importante es la región”, apunta, sobre la cesión de la presidencia a Ciudadanos. A cambio, el PSOE presidirá los ayuntamientos de Murcia, Caravaca de la Cruz, Ceutí, Fuente Álamo y Pliego.
En el Ayuntamiento de Murcia, fuentes de Cs describen la situación como “insostenible”. Mario Gómez, primer teniente de alcalde de Murcia y concejal de Fomento por Ciudadanos, había denunciado el pasado mes de octubre de 2020 que sufría acoso por su labor contra la corrupción en el gobierno municipal de la ciudad. Este martes, el PP hizo dimitir al concejal de Salud en el Ayuntamiento de Murcia, Felipe Coello, que se había vacunado irregularmente, para intentar salvar in extremis el pacto con Ciudadanos, pero no fue posible.
La participación de Unidas Podemos es necesaria para que prospere la moción en el Ayuntamiento de la ciudad de Murcia. Fuentes de Podemos han confirmado que sus dos concejales de Unidas Podemos apoyarán la moción.
El Partido Popular ha reaccionado con un profundo enfado a la estocada de su socio autonómico. Fuentes de la dirección nacional del PP aseguran que se trata de “un acuerdo de Ciudadanos con el PSOE y con Unidas Podemos”. “Es decir, Arrimadas pacta con Iglesias”, afirman, y “permite que los radicales puedan gobernar en Murcia”. “Es una gran irresponsabilidad. Y trae una enorme inestabilidad en plena pandemia sin ningún motivo. Arrimadas rompe su palabra, dijo que el acuerdo duraría cuatro años”, critican fuentes populares. El movimiento de Ciudadanos supone un golpe para el PP de Pablo Casado, que pierde uno de sus cinco barones y uno de los más próximos, y añade más interrogantes en la estrategia del líder de la oposición para reunificar al centro-derecha.
Lea el texto de la moción de censura de Murcia. Si no puede verlo pinche aquí.