Condenado por golpear a un guardia civil durante una protesta frente a la casa de Iglesias y Montero
La juez Margarita Valcarce ha impuesto una pena de siete meses de prisión al hombre por pegar en el pecho a un agente que le pidió que saliera del perímetro de seguridad
Un hombre que protestaba a finales de año junto a otras personas en el exterior del domicilio del vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, y de la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha sido condenado por golpear en el pecho a un guardia civil que le pidió que saliera del perímetro de seguridad de la vivienda, situada en Galapagar (Madrid). La juez Margarita Valcarce, titular del juzgado de lo Penal 14 de Madrid, le ha condenado a siete meses de prisión por un delito de atentado. La sentencia, contra la que cabe recurso, se ha conocido este viernes, aunque se dictó el 29 de enero....
Un hombre que protestaba a finales de año junto a otras personas en el exterior del domicilio del vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, y de la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha sido condenado por golpear en el pecho a un guardia civil que le pidió que saliera del perímetro de seguridad de la vivienda, situada en Galapagar (Madrid). La juez Margarita Valcarce, titular del juzgado de lo Penal 14 de Madrid, le ha condenado a siete meses de prisión por un delito de atentado. La sentencia, contra la que cabe recurso, se ha conocido este viernes, aunque se dictó el 29 de enero.
El tribunal considera “clara e indiscutible” la intención de lesionar y desprestigiar al principio de autoridad que representa el agente agredido y subraya que las grabaciones del momento son “sumamente ilustrativas” para “desvirtuar el principio de presunción de inocencia que ampara el acusado”. Además, añade que las declaraciones de los agentes que que había presentes fueron “claras, contundentes y carentes de ambigüedades”.
Los hechos ocurrieron el pasado 30 de diciembre, sobre las 18.30, cuando un grupo de personas participaba en una de las habituales concentraciones junto a la casa en la que los dos miembros del Ejecutivo viven con sus tres hijos. La sentencia relata que los guardias civiles presentes pidieron al condenado y a otras personas que retrocedieran para respetar el perímetro de seguridad. Sin embargo el hombre rechazó alejarse voluntariamente. Ante su negativa, un agente le requirió que se desplazase de la zona protegida. El hombre, alterado, se negó a seguir sus instrucciones y llamó al guardia civil “delincuente” e “impresentable”. “No voy a cesar hasta que te quite el uniforme”, le dijo el condenado al agente, según la resolución judicial. Mientras el agente le recriminaba su actitud y le obligaba a retroceder, el condenado le golpeó varias veces en el pecho, por lo que varios miembros de las fuerzas de seguridad terminaron deteniéndolo.
Iglesias y Montero han denunciado en varias ocasiones que sufren desde hace meses un acoso diario en su vivienda donde viven con sus tres hijos. El pasado 29 de diciembre, una día antes de la concentración, un juez de Collado Villalba dictó una orden de alejamiento contra Miguel Ángel Frontera, uno de los participantes habituales en estas manifestaciones y uno de los supuestos hostigadores. La pareja se querelló contra él en julio del año pasado. La orden prohibió a Frontera acercarse a menos de 500 metros del vicepresidente segundo y de la ministra de Igualdad tanto en su domicilio como en su lugar de trabajo y “en aquellos otros lugares frecuentados por los mismos”. Asimismo, la Fiscalía también anunció el pasado noviembre que pedía un año de cárcel para una mujer Ana Isabel Quiroga, por tratar supuestamente de saltarse el perímetro de seguridad que rodea la vivienda y agredir de forma leve a uno de los guardias civiles desplegados. Además, pidió seis meses de prisión para su madre, Ascensión Domínguez-Alonso, que intentó presuntamente superar el cordón policial.
Los líderes de Podemos presentaron ante la comisaría de la Policía Nacional del Congreso varias denuncias por actos de “odio” y “acoso” contra su familia que consideran “sistemático” y que, según ellos, se enmarcan en la campaña de hostigamiento organizada por miembros de la extrema derecha.