El PSOE se moviliza para contrarrestar el discurso de Podemos contra la Monarquía

Sánchez insta a sus bases a defender la institución, mientras crece la inquietud por el efecto del debate en el electorado joven

Pedro Sánchez, el martes, en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.Chema Moya (EFE)

En el actual PSOE, que controla de manera casi total Pedro Sánchez, no hay ningún debate interno ni inquietud sobre la vigencia del sistema de monarquía parlamentaria en España, coinciden varias fuentes consultadas. El presidente del Gobierno y líder socialista lo ha dejado claro en sus últimas intervenciones, este jueves de nuevo en una carta enviada a sus militantes. El problema está más en su conflictiva relación con Podemos y en el enganche que el debate sobre la Monarquía puede tener en el electorado joven de izquierd...

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En el actual PSOE, que controla de manera casi total Pedro Sánchez, no hay ningún debate interno ni inquietud sobre la vigencia del sistema de monarquía parlamentaria en España, coinciden varias fuentes consultadas. El presidente del Gobierno y líder socialista lo ha dejado claro en sus últimas intervenciones, este jueves de nuevo en una carta enviada a sus militantes. El problema está más en su conflictiva relación con Podemos y en el enganche que el debate sobre la Monarquía puede tener en el electorado joven de izquierdas que se disputan ambas formaciones.

En la ejecutiva del PSOE del lunes, en la conferencia de prensa de despedida del curso político en La Moncloa ya como presidente del Gobierno del miércoles y en la carta como secretario general del partido que dirigió este jueves a los militantes socialistas, Sánchez ha aprovechado para hacer un balance ultraoptimista de sus siete meses como jefe del Ejecutivo y para revalidar su fe en las principales instituciones del país, con especial acento en la monarquía parlamentaria derivada de la Constitución de 1978. Sánchez no cree que en España haya una necesidad actual de variar de modelo de funcionamiento y en el PSOE no existe ningún sector de relevancia que plantee en estos momentos ese debate, según media de docena de fuentes del máximo nivel del partido consultadas.

Es más, las mismas fuentes reseñan no sin preocupación que en el PSOE hay cada vez menos debates internos, que el hiperliderazgo de Sánchez no tiene ningún contrapeso y que no se recuerda una discusión reciente sobre la monarquía o la república en sus principales órganos de dirección.

Eso no significa que no existan algunas opiniones individuales que sí hayan cuestionado abiertamente el comportamiento en los últimos tiempos de Juan Carlos I, tras conocerse las informaciones sobre sus cuentas en Suiza o su relación con Corinna Larsen. Lo han hecho algunos cargos territoriales y lo han plasmado en un comunicado incluso las Juventudes Socialistas, siempre republicanas y un poco más atrevidas que otros sectores de la organización.

Jaume Collboni, teniente de alcalde y presidente del PSC de Barcelona, fue muy contundente cuando se conoció el abandono de España de Juan Carlos I: “Su abdicación no fue suficiente. Su salida del país, tampoco. Es imprescindible que la Justicia actúe hasta las últimas consecuencias. Nos jugamos más que una forma de Estado, nos jugamos la democracia y la credibilidad de las instituciones”.

En ese contexto interno, y sobre todo ante la virulencia con la que ha recuperado ese debate sobre la monarquía Unidas Podemos tras la salida de España del rey emérito, el líder del PSOE escribió a la militancia para reclamar como propio del partido el pacto de 1978: “La Constitución no fue una cesión ni una concesión. El peor error que podemos cometer es regalar a los conservadores la exclusividad del legado constitucional. Como partido fuimos arquitectos de una Constitución que propició una de las 20 mejores democracias del mundo y dejó atrás una dictadura cruel e indigna”.

El secretario general socialista añade: “Nuestra Constitución ampara derechos sociales amplios que invocamos y que queremos extender y hacer efectivos. Y reconoce y ampara la pluralidad territorial de las nacionalidades y regiones que componen España. La monarquía parlamentaria es un elemento de ese pacto, no todo el pacto. Todo el pacto es la Constitución y no se puede trocear y seleccionar a capricho. Somos leales a la Constitución; a toda, de principio a fin. Y la defenderemos a las duras y a las maduras”.

Sánchez remacha por escrito la posición del partido ante las “presuntas conductas reprobables” que ya ha cuestionado en más de una ocasión del anterior jefe del Estado: “Nadie puede sustraerse a la transparencia de los medios informativos, ni a la acción de los tribunales. Todo responsable público debe rendir cuentas de su conducta y así sucederá sin excepciones. Ahora bien, una conducta irregular compromete a su responsable, no a la institución. Este principio afecta a los agentes sociales, a los partidos, a los gobiernos autonómicos, al propio gobierno de la nación. No se juzga a las instituciones, se juzga a las personas”. Dirigentes del PSOE de varias comunidades autónomas y miembros de la ejecutiva federal interpretaron ese mensaje de Sánchez no en clave interna sino de “respuesta a la actitud actual de Podemos, que, según estas fuentes, “parece haber encontrado un filón electoral al que agarrarse cuando no estaba atravesando sus mejores momentos” y que puede conectar con su votante más de izquierdas y más joven, “los más desenganchados y desencantados con el sistema”.

Ni Sánchez ni el PSOE quieren renunciar a la disputa de ese electorado. Así hay que entender el comunicado oficial de las Juventudes Socialistas crítico con Juan Carlos I, a favor del principio de igualdad democrática de todos los ciudadanos y en el que se exige al rey emérito que cumpla sus deberes con la justicia. La organización juvenil del PSOE se declara en sus estatutos como republicana, con lo que ese pronunciamiento no es una gran novedad aunque la actual situación no les resulta cómoda. El conflicto lo podría tener más grave el PSOE, si Sánchez no lo tuviera tan bajo control. Pero como recordó el miércoles Omar Anguita, líder de Juventudes Socialistas en su ejecutiva, en el aparente peor momento para la Corona, las fuerzas monárquicas, incluido el PSOE, son abrumadoramente mayoritarias en el Congreso.

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