El Viajero
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Paseo por diez paradores únicos

De Alcalá de Henares a Cádiz, una decena de alojamientos que no dejarán indiferente

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El parador gaditano fue levantado de nueva planta en 2012, tras demoler el viejo edificio. En la imagen, una de sus habitaciones.
Vista del mar desde el salón del parador de Cádiz.
El parador de Carmona (Sevilla).
La escalinata del parador de Carmona llega hasta los jardines que acaban en una piscina.
Uno de los patios del parador de Carmona, con arcos y una fuente en el centro.
El parador de Alcalá de Henares apareció en una antología del MOMA de Nueva York sobre lo mejor de la arquitectura española de finales del siglo XX.
Las habitaciones del parador de Alcalá de Henares no se ven, sino que están soterradas en un intríngulis geométrico de jardines desde los que se contemplan los grandes monumentos de la ciudad.
Vista del 'spa' del parador de Alcalá de Henares.
El parador de La Granja de San Ildefonso, en Segovia.
Carlos III ordenó levantar junto al palacio real una residencia para los infantes Gabriel y Antonio. Ese edificio se convirtió en el parador de La Granja.
El parador de La Granja cuenta con una instalación spa multicolor y poliédrica.
El parador de Corias, situado en el monasterio del mismo nombre, en Cangas del Narcea (Asturias).
Una habitación del parador de Corias, en Asturias.
Conocido como El Escorial Asturiano, el monasterio de Corias, reproduce la interminable ristra de ventanas de aquel.
El parador de Granada está situado en el recinto mismo de la Alhambra.
El de Granada es el parador más caro y el más difícil de reservar en verano.
El parador de Granada, situado al pie de Sierra Nevada, es un lugar idóneo respirar aire puro procedente de las montañas.
El parador de Lerma, en Burgos.
En el parador de Lerma tenían su residencia los duques de Lerma desde el siglo XVII, en tiempos de Felipe III.
El palacio que alberga el parador de Lerma tiene un gran valor monumental.
La terraza del parador de Lorca, en Murcia.
Vista de la piscina del parador de Lorca, en Murcia.
Habitación del parador de Lorca.
El parador de Santiago está considerado como el alojamiento turístico más antiguo de Europa, pues ejerció como hospital de peregrinos desde 1499.
Fachada del parador de Santiago de Compostela (A Coruña).
Una de las habitaciones del parador de Santiago, situado en la plaza del Obradoiro.
Parador de Santo Estevo, en Ourense.
Freixedo y Suances, sus arquitectos, han sabido intervenir en este asombroso monasterio originario del siglo VI casi sin tocarlo en el parador de Santo Estevo.
Vista de un espacio del parador de Santo Estevo.