Cartas al director

Las invisibles

Hoy, mi amiga Marga no ha podido más y ha roto a llorar. Ha vuelto a quedar finalista para un trabajo de 20 horas semanales para el que pedían un perfil casi de astronauta sin llegar a pagar el salario mínimo, y le han vuelto a decir que no. Lleva más de cinco años enlazando trabajos malpagados que no sirven más que para limpiar la cara a las listas del paro. Marga tiene estudios y currículo, pero es invisible: es mujer y tiene 43 años. Su realidad no vende, no da votos. Los años de la crisis hundieron a la clase media y se abrió una gran brecha social. ¿Hasta cuándo?

...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Hoy, mi amiga Marga no ha podido más y ha roto a llorar. Ha vuelto a quedar finalista para un trabajo de 20 horas semanales para el que pedían un perfil casi de astronauta sin llegar a pagar el salario mínimo, y le han vuelto a decir que no. Lleva más de cinco años enlazando trabajos malpagados que no sirven más que para limpiar la cara a las listas del paro. Marga tiene estudios y currículo, pero es invisible: es mujer y tiene 43 años. Su realidad no vende, no da votos. Los años de la crisis hundieron a la clase media y se abrió una gran brecha social. ¿Hasta cuándo?

Isabel Chacón. Châtel St. Denis (Suiza)

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En