La Guardia Civil entra en el colegio de Puigdemont en Sant Julià de Ramis para requisar las urnas

Frente a la pasividad de los Mossos d'Esquadra, agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil han tomado la iniciativa para impedir la celebración del referéndum del 1 de octubre, declarado ilegal por la Justicia. Uno de los puntos donde se concentra la atención de la jornada es el colegio de Sant Julià de Ramis, en Girona. Allí estaba previsto que votase el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont durante la mañana. Sin embargo, poco después de las nueve agentes de la Guardia Civil han llegado hasta ese centro de votación para requisar las urnas. Tras realizar un cordón exterior, las personas que se encontraban dentro han cerrado las puertas. Los agentes han roto los cristales con un martillo para poder abrirlas y han cortado el candado que las cerraba para acceder al interior. Allí han sido recibidos con gritos y con el canto del himo catalán, el Segadors. Al no encontrar las urnas, la Guardia Civil ha iniciado entonces una inspección del edificio con el objetivo de hallarlas e incautarlas.

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