Recetas
Resulta alarmante que, tras 15 años del fin de las transferencias del Estado a las comunidades autónomas, la receta electrónica esté solo interconectada en cinco comunidades (Extremadura, Navarra, Castilla-La Mancha, Canarias y, recientemente, la Comunidad Valenciana). Esto significa que si un ciudadano de Galicia quiere irse tres semanas a Andalucía deberá programarlo todo con antelación para llevar consigo su tratamiento si no quiere quedarse sin poder tomar su medicina, lo que puede provocar un desajuste y el consiguiente peligro para su salud.
Esta desigualdad debería sonrojar al M...
Resulta alarmante que, tras 15 años del fin de las transferencias del Estado a las comunidades autónomas, la receta electrónica esté solo interconectada en cinco comunidades (Extremadura, Navarra, Castilla-La Mancha, Canarias y, recientemente, la Comunidad Valenciana). Esto significa que si un ciudadano de Galicia quiere irse tres semanas a Andalucía deberá programarlo todo con antelación para llevar consigo su tratamiento si no quiere quedarse sin poder tomar su medicina, lo que puede provocar un desajuste y el consiguiente peligro para su salud.
Esta desigualdad debería sonrojar al Ministerio de Sanidad, y las comunidades autónomas deberían ponerse manos a la obra para que cualquier ciudadano de España pueda comprarse la medicación que necesite en cualquier punto del país.— Ángel Luis Ramos Villar. Valencia.