La invitada a una boda que descubrió que ella era la novia
El marido le hizo creer que estaban asistiendo a la ceremonia del enlace de un amigo que tienen en común
Cuando las puertas de la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús de Buenos Aires se abrieron ante Mercedes Velan, ella no imaginaba que no asistía como invitada a una novia sino a su propia ceremonia. Su pareja, Gustavo Ortíz, con el que comparte tres hijos, organizó el enlace a escondidas para darle una sorpresa, a pesar de que ya se habían casado por lo civil. Ortíz consiguió reunir en el templo a todos los amigos de Velan, algunos de ellos residentes en Estados Unidos, Canadá, Holanda y España, por lo que la sorpresa de la novia se multiplicó mientras caminaba hacia el altar.
El argentino cuenta que le costó varios años encontrar a un párroco en la capital bonaerense que diera el visto bueno a la boda sin el consentimiento previo de uno de los cónyuges, hasta que encontró a Sebastián García: "Yo te lo hago, me gusta, ¿cuándo quieres casarte?", respondió inmediatamente el cura. Él confiesa que "nunca" había comentado nada sobre casarse por la Iglesia porque no son "súper católicos" y a ninguno de los dos les llamaba la atención. No obstante, a Ortíz le pareció que era una manera de demostrarle su amor ante sus hijos.