Alimentar la guerra con más guerra

Por una vez en mi vida estoy de acuerdo con la canciller Merkel. La solución para acabar con el conflicto entre Ucrania y Rusia no pasa por enviar más armas, como propone y defiende Estados Unidos. Parece increíble que en pleno siglo XXI la única solución que vean algunos países/personas sea alimentar la guerra con más guerra. ¿No hemos aprendido nada de diplomacia? La experiencia nos ha demostrado que la guerra no se acaba con más guerra, y que si no es con mensajes de paz y diálogo, solo alimentamos el odio y el rencor. Miremos si no el ejemplo de Jordania.

Como ciudadana europea me a...

Por una vez en mi vida estoy de acuerdo con la canciller Merkel. La solución para acabar con el conflicto entre Ucrania y Rusia no pasa por enviar más armas, como propone y defiende Estados Unidos. Parece increíble que en pleno siglo XXI la única solución que vean algunos países/personas sea alimentar la guerra con más guerra. ¿No hemos aprendido nada de diplomacia? La experiencia nos ha demostrado que la guerra no se acaba con más guerra, y que si no es con mensajes de paz y diálogo, solo alimentamos el odio y el rencor. Miremos si no el ejemplo de Jordania.

Como ciudadana europea me avergüenzo de cómo estamos haciendo caso omiso a la destrucción de Ucrania. Cada día vemos en los medios de comunicación cómo dos países desarrollados están batiéndose en un duelo en el que solo los ciudadanos pierden, y parece que los organismos internacionales miran para otro lado en vez de desplegar medidas realmente eficaces para que este desacuerdo bélico finalice. No creo que cause un gasto excesivo el procurar una alternativa al conflicto.

Y no, la solución no está en darles más armas y esperar a que uno acabe con el otro.— Carolina Álvarez Borrell.