Un precio de película
Los días 27, 28 y 29 de octubre se celebra la Fiesta del Cine. Su éxito es algo indiscutible, más de un millón de personas ya se han registrado para asistir a una de las miles de salas adheridas y solo el primer día se superaron los 500.000 espectadores.
El reclamo no es otro que el poder ver una película en la gran pantalla por 2,90 euros. Una iniciativa fantástica pero que para mí se convierte en una oportunidad para recordar que el público quiere ver cine, pero no a un precio desorbitado.
En estos días, el flujo de gente es continuo y se han triplicado las ventas de un día nor...
Los días 27, 28 y 29 de octubre se celebra la Fiesta del Cine. Su éxito es algo indiscutible, más de un millón de personas ya se han registrado para asistir a una de las miles de salas adheridas y solo el primer día se superaron los 500.000 espectadores.
El reclamo no es otro que el poder ver una película en la gran pantalla por 2,90 euros. Una iniciativa fantástica pero que para mí se convierte en una oportunidad para recordar que el público quiere ver cine, pero no a un precio desorbitado.
En estos días, el flujo de gente es continuo y se han triplicado las ventas de un día normal. En España el consumo de cine y espectáculos de artes escénicas se ha convertido en un lujo del que mucha gente debe privarse. Con un 21% de IVA, solo superado por Dinamarca (25%) y Hungría (27%), pasar una tarde entretenida implica el desembolso de un dinero que no todo el mundo se puede permitir. Esperemos que esto cambie pronto; mientras tanto, este tipo de iniciativas siempre serán bienvenidas.— Blanca Valverde.