Convocar el referéndum

Desde hace meses estoy intentando entender razones positivas que justifiquen el aumento del independentismo de Cataluña. Aparte, claro está, de las razones generales que hacen que en un momento determinado todos los españoles quisiéramos no tener nada que ver con la clase política que tan penosamente nos gobierna.

Leí con agrado la entrevista en su periódico a mí admirado Lluis Llach. Al ser preguntado por Jordi Pujol dijo que una de las razones por las que quería la independencia era que les permitiría librarse de personajes como Pujol.

Y yo me pregunto ¿cómo? ¿Acaso no le han v...

Desde hace meses estoy intentando entender razones positivas que justifiquen el aumento del independentismo de Cataluña. Aparte, claro está, de las razones generales que hacen que en un momento determinado todos los españoles quisiéramos no tener nada que ver con la clase política que tan penosamente nos gobierna.

Leí con agrado la entrevista en su periódico a mí admirado Lluis Llach. Al ser preguntado por Jordi Pujol dijo que una de las razones por las que quería la independencia era que les permitiría librarse de personajes como Pujol.

Y yo me pregunto ¿cómo? ¿Acaso no le han votado durante todos estos años solamente los catalanes? ¿Ha tenido algo que ver el resto del Estado en su elección? ¿Me lo puede explicar alguien? Lo mismo me ocurrió con el programa de Salvados. El líder independentista se cierra en banda diciendo que siendo independientes estarían mejor. Pero no razona o justifica el porqué. Es un sentimiento, dice. ¿Y las razones?

Teniendo en cuenta que los lideres de esa Cataluña independiente son los que ahora están promocionando una votación en la que solo se hace campaña a favor del sí (recordemos casos como el de Raimon, Cercas... y todos los que han osado decir simplemente que no lo ven claro), promoviendo elecciones con una lista única con ellos mismos para gobernar el nuevo Estado, me pregunto: ¿No se sienten manipulados los catalanes? ¿No les da miedo una lista única? ¿No ven que no se permiten opiniones en contra? ¿Será verdad que al final todo esto es simplemente un tema económico? A mí me faltan los motivos.— María Sancho.