Unos 50 indignados aplazan dos días un controvertido desahucio en Vallecas
Al igual que el caso de ayer en Camarma de Esteruelas, se trata de un impago de alquiler.- "El indignado soy yo", dice el dueño, que asegura llevar 11 meses sin cobrar
El Movimiento 15-M sigue su particular lucha contra los desahucios en Madrid. Esta mañana, gracias a su apoyo, una actriz en paro, Susana García, ha logrado dos días más de plazo para abandonar el piso, un ático de 50 metros cuadrados con terraza situado en el distrito de Puente de Vallecas.
García intentó ayer obtener el apoyo de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Madrid, que en el último mes ha evitado el desahucio de dos vecinos que no podían pagar la cuota de su hipoteca. Al tratarse de un desah...
El Movimiento 15-M sigue su particular lucha contra los desahucios en Madrid. Esta mañana, gracias a su apoyo, una actriz en paro, Susana García, ha logrado dos días más de plazo para abandonar el piso, un ático de 50 metros cuadrados con terraza situado en el distrito de Puente de Vallecas.
García intentó ayer obtener el apoyo de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Madrid, que en el último mes ha evitado el desahucio de dos vecinos que no podían pagar la cuota de su hipoteca. Al tratarse de un desahucio por impago de un alquiler, esta plataforma ha optado por no convocar a sus seguidores, aunque uno de sus coordinadores, Chema Ruiz, sí ha prestado su apoyo "a título personal". Además, García ha contado con el apoyo de la asamblea popular de Puente de Vallecas surgida del Movimiento 15-M, que ha usado su red de contactos para convocar a los indignados a las once de esta mañana a la calle Picos de Europa (Metro Portazgo), donde está la vivienda. "Nuestra vecina Susana García no estará sola ante dicha situación", rezaba la convocatoria en la web de la asamblea de barrio.
Unas 50 personas han acudido a la cita, 40 en la calle y una decena atrincherados en el portal. Hasta el lugar se han desplazado el dueño del piso, Luis Valdecantos, su padre y hermano, el procurador, la secretaria judicial, un cerrajero y cuatro agentes de la Policía Municipal. En este caso no se trata de un desahucio por problemas con la entidad financiera, sino que la mujer, que vive alquilada, no paga el alquiler desde hace once meses. García no se niega a dejar el piso, pero pide un aplazamiento para terminar de vaciar la vivienda y "ajustar" los detalles con Asuntos Sociales, que espera que le proporcionen un piso para "no verse en la calle".
Tras dos horas, ambas partes han llegado a un acuerdo: el desalojo será el próximo miércoles a las nueve y media de la mañana, aunque la inquilina después ha declarado que tratará de ampliar el plazo, que considera insuficiente. El dueño del piso, por su parte, ha asegurado que el indignado es él, ya que al dejar de cobrar el alquiler tuvo que dejar el piso en el que vivía con su pareja. Alega que lleva "mucho tiempo esperando" a poder disponer de su propiedad pero la inquilina "nunca" se va.
Tras el acuerdo, García ha dado las gracias a los congregados y se ha emocionado. Ha explicado que ha sufrido amenazas para abandonar el piso y ha pedido que se vele por los derechos de los inquilinos.
Es la segunda acción del Movimiento en dos días. Una treintena de personas paralizaron ayer el desahucio de un hombre 61 años en un pueblo cercano a Alcalá de Henares. Cuando la Guardia Civil acordonó la zona y les pidió que se marcharan, los indignados se encerraron en el piso del hombre, que está en paro desde hace dos años y hace uno que no paga el alquiler. Los concentrados consiguieron que la orden judicial se pospusiera hasta que el juzgado vuelva a notificar otra fecha.
A mitad de mes, el 15-M consiguió impedir otros dos desalojos. El primero fue el día 15, cuando unas 500 personas cortaron la calle Naranjo (barrio de Tetuán), donde está la vivienda de un inmigrante libanés, su mujer y su hija adolescente, e impidieron que el secretario judicial ejecutase la orden de desahucio por impago. Un día después lograron lo mismo ante la orden de desahucio que pesaba contra un pensionista de 74 años que vive solo en su casa de la calle Alfonso XIII en Parla. El hombre no tiene familiares en España y sufre un 65% de minusvalía tras un accidente que le dejó incapacitado para seguir trabajando dos años atrás.
Uno de los coordinadores de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, Eloy Morte, presentó los informes médicos pertinentes y solicitó la nulidad del desahucio, por lo que las partes implicadas decidieron paralizar la operación sin fijar fecha para una próxima ejecución. El próximo miércoles 6 de julio está convocada una nueva concentración, también en Madrid, en las cercanías de la estación de Metro de Pueblo Nuevo. En esta ocasión sí que se trata de un caso con hipoteca, y está implicado de manera oficial esta plataforma.