Pedro Mesquita (Fujifilm): “Somos de los últimos mohicanos que apuestan por la fotografía”
El presidente de la compañía asegura que el móvil, que parecía una amenaza, se ha convertido en la puerta de entrada para los fabricantes de cámaras digitales, que tienen en las instantáneas su producto estrella
A Pedro Mesquita (Oporto, 1968), presidente y consejero delegado de Fujifilm España, no le gusta que le hagan fotos. “Nada. Aunque me dicen: ‘Ah, qué bien que sales’”, afirma. Sin embargo, defiende a capa y espada este segmento del negocio, que alguna vez fue el alma de la empresa. “La fotografía es eternizar un momento. Creo que tiene un valor documental. Es registrar algo que te queda para toda la vida”, explica. Hace 30 años, cuando este graduado en Radiología entró a trabajar en la firma nipona, el segmento de captura de imágenes suponía un 60% de los ingresos de la compañía a nivel global. Hoy, representa apenas un 16%. La irrupción de los teléfonos móviles ha obligado a la empresa a reorientar su estrategia, aunque sin dejar de innovar en el mercado de películas y dispositivos fotográficos.
“Tenemos una carga genética en ese campo y estamos muy orgullosos. Somos de los últimos mohicanos que siguen apostando por la foto”, enfatiza Mesquita. “Y queremos seguir”. Una de las grandes apuestas de la empresa es su línea de cámaras instantáneas, cuyos modelos más recientes incluso se conectan a los teléfonos inteligentes para imprimir fotografías al instante. Este nicho de mercado vive un verdadero auge. Según la compañía, el fenómeno comenzó con los más jóvenes, quienes nunca habían experimentado con una imagen impresa. La gran explosión se dio entre 2008 y 2009, gracias a la aparición de estos dispositivos en populares series de televisión coreanas. Desde entonces, Fujifilm ha invertido en esta línea de negocio.
Y la estrategia está cosechando éxitos. Durante el primer trimestre del año fiscal, el segmento de Imagen de Fujifilm ha sido el motor de crecimiento. Sus ingresos alcanzaron los 842,7 millones de euros, un 11,2% más que el año anterior, y sus ganancias se dispararon a 242,4 millones de euros, con un repunte del 28,4%. Esto la convierte en el área que más crece en rentabilidad, superando a Salud, Electrónica e Innovación Empresarial. El fuerte repunte se atribuye principalmente a la robusta demanda de los sistemas instantáneos y de las cámaras digitales profesionales. “El móvil, que parecía una amenaza, se ha convertido en una puerta de entrada para los fabricantes de cámaras digitales”, subraya Mesquita. A pesar de estas cifras, el directivo considera muy difícil que el segmento fotográfico recupere el peso que tenía en la cuenta de resultados hace 30 años.
Fujifilm, fundada en Tokio en 1934, fue durante décadas un pilar global en la fotografía, compitiendo directamente con Kodak. Pero la revolución digital lo cambió todo. Las cámaras digitales empezaron a dominar el mercado y, de repente, la película, el producto estrella de la firma, quedó obsoleta. “Cuando teníamos cámaras analógicas, en promedio, cada español o portugués usaba un carrete de 36 fotos”, detalla Mesquita. Pero a inicios de este siglo, la demanda se desplomó un 90%. El negocio principal de la empresa se estaba hundiendo, y su futuro parecía incierto. Fujifilm se vio obligada a una completa reinvención.
“Antes del auge de la digitalización, cuando aún generábamos la mayor parte de nuestros beneficios con la fotografía tradicional, la compañía ya estaba diversificándose”, destaca el directivo. Gracias a ello, cuando llegó ese punto de inflexión, ya contaban con varios nichos a explorar. Un ejemplo clave es el área de Salud (Healthcare), que se ha convertido en una de sus grandes apuestas, abarcando desde equipos médicos hasta servicios de fabricación biofarmacéutica. Esta área representa el 32% de los ingresos de la firma a escala mundial. También destaca la división de Innovación Empresarial (Business Innovation), que incluye soluciones de oficina, gráficos y comunicación. “Hoy en día, casi todo lo que tocamos está impreso digitalmente, incluso en el entorno industrial”, explica el responsable de la firma. Este segmento es el de mayor contribución, con un 37,5% de los ingresos. Detrás, en importancia, se sitúan las divisiones de Electrónica y la propia de Imagen y Consumo. “Gracias a esta diversificación, el proceso de transformación fue más sencillo. A diferencia de otras compañías que tuvieron que abandonar el mundo de la fotografía”, señala.
España
Geográficamente, el mercado principal de Fujifilm es Japón (34,3% de los ingresos en el primer trimestre del año fiscal 2025), seguido de América (20,7%) y Europa (16,6%). Otros, como el chino, que representa el 15,5% de su facturación, también son importantes. En la península Ibérica, el negocio ronda los 165 millones de euros, con un 45% enfocado en sanidad y entre un 35% y un 40% en el área de foto-imagen (fotografía instantánea, digital, printing) y 15% enfocado Graphics Communication & Device Technology. “En 2025 esperamos cerrar con una facturación cercana a los 180 millones de euros en el mercado ibérico. A nivel europeo, el grupo espera alcanzar una cifra cercana a los 2.000 millones”, pronostica Mesquita.
Sin embargo, el consejero delegado está atento al avance de la guerra comercial y su impacto. “Ahora, hay temas proteccionistas que no solo tienen que ver con los aranceles. Hablamos de medidas como el dumping o anti-dumping, que afectan a productos fabricados en China. Nos preocupa la actividad, pero el footprint [huella] de Fujifilm es tan grande que tenemos alternativas”, afirma el directivo. Mercados como la India, con un “crecimiento silencioso”, son una piedra angular para el futuro. Fujifilm, insiste Mesquita, posee una gran capacidad de adaptación y resiliencia. “Si algo tenemos, es resiliencia. Es parte de nuestra cultura. Estamos acostumbrados a las dificultades. Los japoneses llevan eso en su ADN”, finaliza.