La inflación de la eurozona repunta una décima en agosto hasta el 2,1%
Es la primera vez desde abril que los precios superan el 2% y la tasa subyacente se mantuvo en el 2,3%
La inflación de la eurozona repuntó levemente en agosto hasta situarse en el 2,1%, una décima más que en julio, según los datos adelantados que ha hecho públicos este martes la oficina estadística europea (Eurostat). Así, el dato no se aleja del objetivo del Banco Central Europeo (BCE) de mantener la inflación en el medio plazo cercana al 2%, en plena guerra arancelaria con Estados Unidos y con dudas sobre el crecimiento de algunas de las mayores economías del bloque. Sin embargo, es la primera vez desde abril que se ubica por encima de este nivel.
Por componentes, la subida del precio de los alimentos frescos se situó en el 5,5%, una décima más que en julio, mientras que la de los procesados, el alcohol y el tabaco se ubicó en el 3,2%, una décima menos que el mes anterior. Los costes de los servicios experimentaron también una caída de una décima y se situaron en el 3,1%. Los bienes industriales no energéticos se encarecieron un 0,8% interanual pero no subieron respecto a julio, mientras que los de la energía se encarecieron cinco décimas respecto a julio aunque se abarataron un 1,9% respecto a agosto de 2024.
La inflación subyacente, que excluye los elementos más volátiles de la cesta de la compra como los alimentos frescos o la energía, se situó en el 2,3%. Es el mismo dato que el registrado en julio para este indicador, que se considera una señal adelantada del comportamiento de los precios generales a medio plazo.
Por países, las mayores tasas de inflación se dieron en Estonia (6,2%), Croacia (4,6%) y Eslovaquia (4,4%). El único país de la eurozona que experimentó un retroceso en la variación de precios fue Chipre (-0,1%). De las principales economías del euro, Alemania vio como su inflación se situó en el 2,1%, tres décimas más que en julio, mientras que la francesa ha descendido una décima hasta el 0,8% y la italiana se ha mantenido en el 1,7%. En el caso de España, el Instituto Nacional de Estadística ya dio a conocer que la inflación se mantuvo en agosto en el 2,7% gracias a la bajada de los precios de la alimentación y un encarecimiento moderado de la electricidad.
El dato conocido este martes tienen implicaciones para la política monetaria de la eurozona. El pasado julio, el BCE decidió poner fin a la senda de reducción de los tipos de interés y los mantuvo en el 2% gracias a la moderación de este indicador, tras ocho rebajas consecutivas desde mediados de 2024. En una entrevista en Reuters difundida este martes por la web de la institución europea, la economista alemana y miembro del Comité Ejecutivo del BCE, Isabel Schnabel, ha asegurado que “la inflación se mantiene, en general, como se esperaba, en el 2%“, rechazando cualquier posibilidad de nuevas rebajas a corto plazo.