Peter Diamandis: “Espero ver coches voladores circulando a finales de esta década”
El escritor y filántropo estadounidense augura que la humanidad llegará a vivir 150 años
WhatsApp se ha caído y el WiFi funciona regular, así que cuando Peter Diamandis sale al escenario del Palacio de Cibeles de Madrid puede decirse que la fe en la tecnología atraviesa una pequeña crisis entre el auditorio. El médico e ingeniero, nacido en Nueva York hace 61 años, fue el conferenciante estrella este martes del Audi Summit for Progress organizado por la marca alemana de vehículos, y su oratoria es para muchos un buen antídoto contra el desánimo.
El fundador de la Sing...
WhatsApp se ha caído y el WiFi funciona regular, así que cuando Peter Diamandis sale al escenario del Palacio de Cibeles de Madrid puede decirse que la fe en la tecnología atraviesa una pequeña crisis entre el auditorio. El médico e ingeniero, nacido en Nueva York hace 61 años, fue el conferenciante estrella este martes del Audi Summit for Progress organizado por la marca alemana de vehículos, y su oratoria es para muchos un buen antídoto contra el desánimo.
El fundador de la Singularity University y los XPrize, habitual de las charlas TED y amigo del magnate Elon Musk, posee una confianza ciega en el poder de la innovación y la ciencia. Ha creado un buen número de compañías tecnológicas, y ha escrito varios libros en los que augura un futuro de abundancia, longevidad, coches autónomos y voladores, conquista espacial y aumento exponencial de los recursos. Algo que cuesta imaginar en tiempos de guerra, ahorro energético y miedo a la recesión. Unos minutos después de su intervención, el autor de El futuro va más rápido de lo que crees (Deusto), elegido en 2014 por la revista Fortune como uno de los 50 líderes más influyentes del mundo, atiende a EL PAÍS.
Pregunta. ¿Cuál es el próximo gran cambio tecnológico por llegar?
Respuesta. El mayor impacto que vamos a ver en todas las áreas durante esta década será el impacto de la inteligencia artificial, en particular en el transporte, que se vuelve inteligente. Me gusta usar el término auto-mágico: automático y mágico. Así que estás desayunando con tu familia, tu inteligencia artificial (IA) conoce tu calendario. Te ve levantarte y dirigirte hacia la puerta principal. La abres y el coche se detiene y sabe a dónde vas. Entras en la parte trasera del coche y como tu IA sabe que no dormiste bien ha pedido un automóvil que lleve una cama en la parte trasera y puedes tomar una siesta en su camino a tu próxima ubicación. Dentro se reproduce la música que tenías en tu sala de estar o la continuación de la película que no acabaste. Los sistemas son automáticos y te llevan por la ruta más rápida. La IA nos llevará a los vehículos autónomos y en un futuro al vehículo aéreo eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL). A los coches voladores. Veremos todas estas cosas. No es cuestión de si sucederá, sino de cuándo.
P. El coche autónomo está teniendo problemas que han retrasado su llegada más de lo que muchos auguraban, y el volador parece en una fase bastante inicial. ¿Le decepciona esta demora? ¿Qué fechas maneja?
R. Sí, los plazos están al menos cinco años por detrás de las expectativas iniciales, pero estoy seguro de que veremos estas tecnologías en nuestra vida diaria. Es simplemente una cuestión de cuándo serán lo suficientemente seguras y estén disponibles. Con los automóviles autónomos, la velocidad a la que aumenta la inteligencia artificial es asombrosa, y me sorprendería si no los viéramos circulando a finales de 2025. En el caso de los coches voladores, hay al menos cinco o seis empresas importantes que han recaudado miles de millones de dólares y están empezando a producirlos. Al comienzo se usarán para entregar paquetes, como el correo aéreo. Y luego habrá entregas humanas. Espero que se impongan y estén listos a finales de esta década.
P. Muchos ciudadanos están sufriendo hoy los problemas de los altos precios de la energía y la inflación, y la guerra en Ucrania no tiene visos de terminar. ¿No choca eso con su idea de progreso rápido e ilimitado?
R. Para nada. Hemos tenido un increíble siglo de progreso. Si piensas en cómo era la vida hace 100 años o 120 años, y la comparas con hoy, es la noche y el día. Y en ese periodo tuvimos la Primera Guerra Mundial, la gripe española, la Segunda Guerra Mundial y la Guerra de Vietnam. Cientos de millones de personas murieron. Siempre ha habido altibajos, pero a largo plazo, el progreso es extraordinario.
P. La sensación general, sin embargo, es de que todo está empeorando.
R. Vivimos en un mundo en el que solo nos enfocamos en lo que está sucediendo en este momento. Y lamentablemente las buenas noticias no venden periódicos. Las malas sí. Nos informan de cada asesinato, cada político corrupto y cada problema en el planeta. Por cada noticia positiva hay 10 negativas, así que entrenamos nuestra mente para ver solo los sucesos negativos. Pero hay un progreso increíble en todos los campos, aunque solo oigamos hablar de Ucrania y Rusia, y cada cinco minutos nos recuerden nuevos problemas.
P. De las grandes crisis surgen a veces grandes soluciones, como la vacuna contra la covid ¿la pandemia ha sido un acelerador o ha retrasado la investigación en otras áreas?
R. Creo que ha acelerado la tecnología de la salud y la biotecnología en todos los ámbitos. Hay más gente estudiando medicina, más inversores poniendo dinero en salud, y más gobiernos promoviendo leyes que favorezcan a la industria sanitaria. Todo se ha adelantado al menos cinco años.
P. Una de sus obsesiones es la longevidad. Incluso han lanzado un premio millonario para quien halle fórmulas para retrasar el envejecimiento. ¿Cuál cree que es el techo al que la humanidad puede aspirar?
R. Los humanos más longevos que conocemos hoy día rondan los 120 años. Y hoy aceptamos que llegar a 80 años es una buena y larga vida. Pero creo que eso cambiará muy rápidamente, y nuestras expectativas pasarán a ser estar por encima de los 100 y llegar a los 120. Tengo entre mis amigos cercanos a algunos de los mejores investigadores y científicos en este campo, y les preguntó, ¿creéis que 120 años es el límite? Me responden claramente que no, que deberíamos poder ir más allá y llegar a los 150 años. Ese debería ser nuestro objetivo.
P. ¿Cómo pagaríamos las pensiones entonces?
R. La gente se jubila porque está cansada y tiene dolores. Si somos capaces de crear un mundo en el que podamos seguir bien y pensar con claridad más tiempo, tendrán vitalidad y energía para trabajar más años. Es cierto que nuestro sistema económico no está pensado para estos 20 o 30 años de vida adicional, así que es importante reflexionar sobre ello.
P. La irrupción de la tecnología en nuestras vidas también desata preocupaciones, entre ellas los problemas de datos y privacidad. ¿Cuáles le inquietan?
R. Creo que la idea de privacidad se perdió hace ya mucho tiempo. No creo que ninguno de nosotros la tenga. Lo que me preocupa son los dos lados de la ecuación. Primero, que haya una sobrerregulación de los gobiernos que expulse la tecnología desde EE UU y Europa hacia Asia. Y por otro lado, creo que los empresarios deben unirse y mostrar una visión clara sobre hacia dónde quieren ir. Sigo preocupado por las pandemias. Creo que la covid fue una pandemia de entrenamiento. Que tenemos que estar preparados para algo que podría ser peor. Y estoy preocupado por un futuro en el que los impactos de asteroides podrían tomarnos por sorpresa.
P. Entre sus cercanos tiene a Elon Musk, el hombre más rico del mundo. ¿Cómo es su relación con él?
R. Conozco a Elon desde hace 22 años. Somos amigos. Ha financiado algunos proyectos a lo largo de los años, incluido nuestro premio de 100 millones de dólares (para quien desarrolle tecnologías que capturen dióxido de carbono de la atmósfera o los océanos). Es uno de los empresarios más brillantes que he conocido y nunca apostaría en su contra. Creo que ha transformado el transporte y el espacio. No hay nadie cercano a él en la arena espacial. Conozco su nivel de propósito y pasión, y sé que no se detendrá ni disminuirá la velocidad hasta que logre sus objetivos.