Bruselas da luz verde a la nueva línea de 10.000 millones en avales del ICO
La medida forma parte de paquete anticrisis aprobado por el Gobierno tras la invasión rusa de Ucrania
La Comisión Europea ha dado su visto bueno a la ayuda de 10.000 millones de euros que el Gobierno español ha diseñado para las actividades más afectadas por la guerra en Ucrania. El apoyo consiste en una nueva línea de avales de créditos ICO que el Ejecutivo aprobó en marzo, y podrán solicitarlo los autónomos y las empresas golpeadas por el conflicto que necesiten liquidez.
Este apoyo forma parte del ...
La Comisión Europea ha dado su visto bueno a la ayuda de 10.000 millones de euros que el Gobierno español ha diseñado para las actividades más afectadas por la guerra en Ucrania. El apoyo consiste en una nueva línea de avales de créditos ICO que el Ejecutivo aprobó en marzo, y podrán solicitarlo los autónomos y las empresas golpeadas por el conflicto que necesiten liquidez.
Este apoyo forma parte del paquete anticrisis que el Gobierno aprobó a finales de marzo, un mes después de la invasión rusa en Ucrania. De estos 10.000 millones, el Ejecutivo desbloqueó el mes pasado un primer tramo de 5.000 millones, pendiente de la autorización de Bruselas.
”Este régimen por valor de 10.000 millones de euros permitirá a España mitigar el impacto económico de la guerra iniciada por Putin en Ucrania y seguir apoyando a las empresas de todos los sectores afectados por la actual crisis geopolítica. Seguimos apoyando a Ucrania y al pueblo ucraniano”, ha señalado la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager.
Reglas comunitaria
En un comunicado difundido este jueves, Bruselas explica que la línea de 10.000 millones en avales del ICO cumple con las condiciones del Marco Temporal de Crisis. Esta herramienta fue aprobada a finales de marzo por la Comisión para relajar las normas comunitarias de competencia, con el objetivo de permitir a los Estados miembros la concesión de ayudas a sus empresas en el contexto de la guerra en Europa.
La invasión rusa de Ucrania está suponiendo un duro revés para la economía mundial y sobre todo europea, que ya venía noqueada por la pandemia del coronavirus. Las sanciones impuestas a Moscú y el encarecimiento de la energía ―ya atrapada en una espiral alcista desde el año pasado― causado por el conflicto se han convertido en una verdadera losa para infinidad de actividades y han contagiado el alza de precios al resto de sectores. En mayo, la inflación alcanzó el 8,9% en España y el 8,1% en la zona euro, la cota más alta desde la creación de la moneda común.
El marco temporal estará en vigor hasta al menos finales de año y contempla una serie de reglas que los países miembros tienen que respetar. En el caso de la línea de avales del ICO, las autoridades comunitarias han comprobado que se otorgarán hasta el 31 de diciembre y no excederán el tope de 35.000 euros por empresa, en el caso se dediquen a la agricultura, pesca y acuicultura, y de 400.000 si es de otro sector.
Según estas reglas especiales de ayudas públicas, el vencimiento de los avales no puede exceder los ocho años y las primas deben respetar unos niveles mínimos que dependen de la cobertura de la garantía y la duración de los préstamos. Los servicios de Competencia de la Comisión Europea han remarcado, además, que la nueva línea de avales del ICO incluye una serie de condiciones para limitar posibles distorsiones, entre ellas salvaguardias que garantizan que “las ventajas de la iniciativa son disfrutadas por los beneficiarios finales a través de los intermediarios financieros”.
“La Comisión ha llegado a la conclusión de que el régimen español es necesario, adecuado y proporcionado para poner remedio a una grave perturbación en la economía de un Estado miembro”, señala Bruselas en su comunicado.