Heineken España perdió 26,2 millones de euros en 2020 por las restricciones en la hostelería

Las ventas de la cervecera cayeron casi un 23% a causa de la pandemia, en especial por la menor actividad en bares y restaurantes

Madrid -
Logo de Heineken en uno de los edificios de la compañía.AMANDA PEROBELLI (Reuters)

Heineken España pagó en 2020 el periodo de confinamiento domiciliario y las restricciones. La menor actividad social y comercial ha reducido el consumo de cerveza, especialmente en bares. De ahí el descenso de la facturación del 22,9%: la compañía pasó de vender 969,5 millones a quedarse en 747,8 millones el año pasado. Todo esto se refleja de forma meridiana en los resultados, que se tiñeron de rojo en el ejercicio de la pandemia con unas pérdidas de 26,2 millones, según se recoge ...

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Heineken España pagó en 2020 el periodo de confinamiento domiciliario y las restricciones. La menor actividad social y comercial ha reducido el consumo de cerveza, especialmente en bares. De ahí el descenso de la facturación del 22,9%: la compañía pasó de vender 969,5 millones a quedarse en 747,8 millones el año pasado. Todo esto se refleja de forma meridiana en los resultados, que se tiñeron de rojo en el ejercicio de la pandemia con unas pérdidas de 26,2 millones, según se recoge en las cuentas presentadas por la empresa en el Registro Mercantil.

“Durante el ejercicio 2020, se ha producido un significativo impacto económico negativo asociado a la situación de pandemia de la covid que ha supuesto una disminución muy relevante de ingresos, principalmente, en el canal Horeca, permaneciendo bares y restaurantes cerrados de marzo a junio o, en algunos casos, diversos meses posteriores en función de la demanda y de las normativas impuestas por las respectivas comunidades autónomas, lo que ha afectado directamente al importe neto de la cifra de negocios de la sociedad, que ha disminuido un 23% respecto al ejercicio anterior”, explica la compañía en las cuentas.

Portavoces de la firma añaden que ante esa situación se decidió sacrificar beneficios en favor del cuidado del equipo y los clientes hosteleros. “Se hizo un esfuerzo inversor extraordinario de más de 150 millones de euros”, sostienen estas fuentes. Esto ha sido posible gracias a los resultados de 2019, cuando obtuvo unos beneficios de 86,3 millones, y al apoyo de la solvencia de la compañía a nivel global. Gracias a ello, según portavoces de Heineken, en este 2021 ya ha vuelto a la senda del crecimiento: “Durante el tercer trimestre, el canal de hostelería creció algo más del 10%, compensando el descenso en torno al 5% en el canal de alimentación. Y el porfolio de marcas premium subió fuertemente, liderado por El Águila, Cruzcampo Especial y la marca Heineken, que creció a doble dígito”.

De vuelta al complicado 2020, el resultado de explotación de la compañía también quedó en rojo, con -38 millones de euros anotados frente a los 106,8 millones en positivo de 2019. Todo ello es la consecuencia de los riesgos que atravesó el año pasado. Heineken España destaca que en 2020 los principales retos fueron los periodos de cierre total de la hostelería, restricciones en la reapertura, reduciendo aforo y horarios, la caída del turismo y el cambio de comportamiento del consumidor, con mayor consumo en casa y evitando el consumo fuera del hogar.

Además, aparecieron otros derivados de la crisis económica surgida por el coronavirus, que se mantendrán y tendrán mayor impacto a medio y largo plazo: “Potencial cierre definitivo de puntos de venta de hostelería, con incapacidad para superar el periodo de confinamiento. Potenciales quiebras de empresas colaboradoras, clave en nuestra cadena de valor. Riesgo de liquidez y una contracción del mercado de crédito”, señala la compañía.

A estos riesgos añade el de operaciones por una situación “cambiante e impredecible”. Y el de variación de determinadas magnitudes financieras: “Los factores que se han mencionado anteriormente, junto con otros factores específicos como las medidas aplicadas en España al sector de la restauración y ocio pueden provocar una disminución en los próximos estados financieros de los importes de cifra de negocios y resultado operativo”. Es decir, puede que ya haya pasado lo peor de la pandemia, pero la cervecera todavía no descartaba nuevos contratiempos. De hecho, comenzó 2021 con un acuerdo con la representación de los trabajadores para realizar un ERE.

En este contexto de crisis, Heineken España mantuvo su gasto en personal algo por encima de los 200 millones de euros en el año de la pandemia. Y pagó una gratificación a los empleados que tuvieron que ir físicamente a las fábricas durante la fase más dura de la pandemia. Eso sí, en número de trabajadores, la firma ya se anotó una caída del 8%, al pasar de los 1.590 empleados de 2019 a los 1.463 del pasado año, de los que el 98% tiene contrato indefinido.

“A pesar de las dificultades que hemos vivido durante 2020 nos hemos esforzado para mantener el empleo de toda nuestra gente. Además, para agradecer a los más valientes su compromiso y estar en su puesto de trabajo a pesar de los peores momentos de incertidumbre vividos durante el periodo de confinamiento, hemos concedido una gratificación a quienes han tenido que seguir acudiendo a las fábricas, con una dotación de 250 euros a la semana”, explica la compañía en el informe de gestión.

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