El IPC encadena ocho meses en negativo tras mantenerse en el -0,8% en noviembre
El encarecimiento de la luz no fue suficiente para compensar la bajada del precio de los alimentos
El IPC encadenó en noviembre su octavo mes consecutivo en negativo, terreno en el que entró en abril como consecuencia directa de la pandemia. Según ha adelantado el INE este lunes, la tasa de inflación se mantuvo en el -0,8%, la misma cifra que en octubre. La oficina estadística achaca la evolución del índice al encarecimiento de la electricidad, frente a la caída del precio de la luz hace un año, que, no obstante, no fue suficiente para compensar el abaratamiento de los alimentos.
En términos mensuales, el índice de precios subió un 0,2% respecto al mes de octubre, lo que deja la tasa...
El IPC encadenó en noviembre su octavo mes consecutivo en negativo, terreno en el que entró en abril como consecuencia directa de la pandemia. Según ha adelantado el INE este lunes, la tasa de inflación se mantuvo en el -0,8%, la misma cifra que en octubre. La oficina estadística achaca la evolución del índice al encarecimiento de la electricidad, frente a la caída del precio de la luz hace un año, que, no obstante, no fue suficiente para compensar el abaratamiento de los alimentos.
En términos mensuales, el índice de precios subió un 0,2% respecto al mes de octubre, lo que deja la tasa anual en el -0,8%, la misma que el mes anterior. El índice se mueve en terreno negativo desde abril, justo después de la irrupción del virus en Europa y en pleno confinamiento. Todos los bienes y servicios relacionados con la movilidad (combustibles, viajes, hostelería) cayeron entonces a plomo, llevando el índice a tasas negativas por primera vez desde 2016. Desde entonces, la tasa de inflación no ha regresado a terreno positivo: el amago de recuperación del verano se vio frustrado en septiembre y octubre con las nuevas medidas de restricción para contener rebrotes, que llevaron a terreno negativo 10 de los 12 grupos en los que el INE divide los bienes y servicios que componen la cesta con la que se elabora el índice.
Noviembre ha sido el mes de la esperanza, con las vacunas, pero la tasa sigue en mínimos. En este caso, según explica el INE en su nota de resultados, el índice se mantuvo en el -0,8%, inmovilizado por dos fuerzas contrapuestas. Por un lado, la electricidad se encareció, lo que contrasta con la caída de precios de hace un año. El INE no especifica la cuantía de la subida o bajada, pero según los datos del operador mayorista del mercado eléctrico (OMIE), durante el mes de noviembre, la luz en España marcó un precio medio de 41,93 euros el megavatio/hora (MW/h), frente a los 36,56 de octubre, es decir, una subida del 14,7%. En noviembre del año pasado, el precio medio fue de 42,19 euros, una caída del 10,5% frente a los 47,17 euros MW/h del mes anterior.
Por otro lado, la subida de la luz se compensa con el abaratamiento de los precios de los alimentos, una bajada de precio que contrasta con la estabilidad que marcaban hace un año. En general, los productos de alimentación se abarataron un 0,9% respecto a octubre, lo que sitúa la tasa anual de esta partida en el 1,3%, un punto menos que el mes anterior. Dentro del grupo de alimentación y bebidas, único del que el INE especifica la variación, los alimentos frescos se abarataron un 2,2% en noviembre respecto al mes anterior, con lo que su tasa anual se sitúa en el 2%, frente al 4,1% de octubre.
Los alimentos elaborados caen en noviembre un 0,1% mensual, con lo que su tasa anual queda en el 0,9%, una décima menos que en octubre. Este han sido uno de los grupos que más han tirado hacia arriba del IPC en 2020, debido a las restricciones derivadas de la pandemia, que han obligado a los ciudadanos a reducir al mínimo sus visitas a restaurantes y a gastar más en comida para elaborar y consumir en casa mientras dejaban de hacerlo en otros bienes.