La alcaldesa que tiraba de tarjeta

La exedil de Serranillos del Valle compró con cargo a los fondos del municipio bolsos de lujo y juguetes

El nuevo alcalde independiente de Serranillos del Valle, Antonio Sánchez Fernández, llevará ante la Fiscalía Anticorrupción los movimientos supuestamente irregulares que realizó su antecesora en el cargo, Olga Fernández (PP), con una tarjeta de crédito municipal. Fernández gastó 8.400 euros en sus últimos nueve meses de mandato, según la documentación a la que ha tenido acceso este periódico. Los recibos revelan compras de muebles y utensilios de cocina en Ikea, un ordenador portátil y un Ipad comprados con un mes de diferencia, dos bolsos de 180 euros cada uno en una tienda de la calle de Ser...

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El nuevo alcalde independiente de Serranillos del Valle, Antonio Sánchez Fernández, llevará ante la Fiscalía Anticorrupción los movimientos supuestamente irregulares que realizó su antecesora en el cargo, Olga Fernández (PP), con una tarjeta de crédito municipal. Fernández gastó 8.400 euros en sus últimos nueve meses de mandato, según la documentación a la que ha tenido acceso este periódico. Los recibos revelan compras de muebles y utensilios de cocina en Ikea, un ordenador portátil y un Ipad comprados con un mes de diferencia, dos bolsos de 180 euros cada uno en una tienda de la calle de Serrano y múltiples facturas de gasolina, restaurantes y hoteles.

El alcalde y sus asesores han buscado en los despachos del Ayuntamiento y en otros servicios el material comprado, pero no lo han encontrado. "Habrá que revisar los siete años anteriores para ver si esto era una práctica habitual", comenta Sánchez en un despacho.

En la tarjeta también se han cargado unas compras realizadas en una juguetería pocos días antes del día de la cabalgata de Reyes. La alcaldesa lo justifica diciendo que se regalaron juguetes a niños de familias desfavorecidas de la población. Algo que los actuales dirigentes municipales niegan.

La popular Fernández, que estuvo ocho años en el cargo hasta que perdió las pasadas elecciones, ha justificado los gastos aduciendo que todo lo comprado respondía a necesidades del municipio, como material para la guardería, el belén viviente o la cocina del centro de menores. En el caso del material informático que adquirió a pocos meses de las elecciones y que aún no había devuelto a pesar de haber dejado el cargo hace dos meses, dice que lo iba a hacer en breve, cuando de una vez por todas en una tienda le borrasen todos los documentos que guardaba dentro.

Los dos bolsos comprados en la tienda de la diseñadora Purificación García, adquiridos en octubre, fueron "regalos de protocolo" a alguna autoridad, aunque la exalcaldesa no quiso especificar a quién ni cuándo se le obsequió. Su sucesor cree que está fuera de toda lógica hacer este tipo de presentes a las personalidades que visitan el pueblo, si es que se hicieron: "A menos que la diseñadora haya sacado una línea con el escudo del pueblo bordado. En ese caso estaría justificado".

La alcaldesa presentó en su momento todas las facturas al interventor municipal, que es un funcionario que no depende de ninguno de los grupos representados en el Consistorio. No en todos los justificantes figura el motivo del gasto.

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