Una madre, a prisión por agredir a una profesora
La madre de un niño de cinco años ha sido condenada en sentencia firme a tres años de cárcel por agredir a la maestra de su hijo en Fuente Vaqueros (Granada). El motivo que le llevó a entrar en clase, coger del pelo a la docente y lanzarla de un empujón hacia la pizarra fue el castigo que le había impuesto al alumno, al que dejó sin merienda. Si no solicita el indulto y se le concede, la mujer, de 23 años e iniciales E. C. F. y con una condena previa por atentado, tendrá que ingresar en prisión.
La Audiencia de Granada ha confirmado la sentencia que dictó el pasado noviembre el Juzgado ...
La madre de un niño de cinco años ha sido condenada en sentencia firme a tres años de cárcel por agredir a la maestra de su hijo en Fuente Vaqueros (Granada). El motivo que le llevó a entrar en clase, coger del pelo a la docente y lanzarla de un empujón hacia la pizarra fue el castigo que le había impuesto al alumno, al que dejó sin merienda. Si no solicita el indulto y se le concede, la mujer, de 23 años e iniciales E. C. F. y con una condena previa por atentado, tendrá que ingresar en prisión.
La Audiencia de Granada ha confirmado la sentencia que dictó el pasado noviembre el Juzgado de lo Penal 1 que condenó a la agresora a tres años de cárcel por un delito de atentado, a pagar 360 euros de multa por una falta de lesiones y a indemnizar a la víctima con 300 euros.
La defensa y la acusación particular presentaron sendos recursos, pero la Audiencia los ha desestimado y confirma la sentencia, según informó ayer el diario Ideal. La acusada, que alegó ansiedad e incidió en que la maestra estaba en prácticas para que no fuera considerada funcionaria, menoscabó el principio de autoridad a la docente agredida y dio a los alumnos -niños de cinco años entre los que estaba su propio hijo- una "lección práctica de cómo eludir el cumplimiento de las normas de conducta", según la resolución.
La agresión fue considerada "de gravedad" no tanto por el resultado sino por el contexto y el modo en el que se llevó a cabo. La sentencia resalta que la mujer actuó con "el grado de educación y civismo más bajo que podía mostrar".