El PSC exhibe su mayoría absoluta en Lleida y respira en Tarragona

El PSC salvó dos ciudades del desastre que supuso el 22-M: Lleida, con la mayoría absoluta de Àngel Ros, y Tarragona, donde la discrepancia entre CiU y el PP ha evitado que los socialistas perdieran la alcaldía. Como estaba previsto, Josep Fèlix Ballesteros fue investido alcalde de Tarragona, aunque gobernará en minoría.

Podrá hacerlo cuatro años si el líder del PP mantiene el compromiso que asumió ayer en la sesión de investidura. Alejandro Fernández se comprometió a no apoyar una moción de censura tras las elecciones generales de marzo de 2012 para desalojar a Ballesteros del cargo. "...

El PSC salvó dos ciudades del desastre que supuso el 22-M: Lleida, con la mayoría absoluta de Àngel Ros, y Tarragona, donde la discrepancia entre CiU y el PP ha evitado que los socialistas perdieran la alcaldía. Como estaba previsto, Josep Fèlix Ballesteros fue investido alcalde de Tarragona, aunque gobernará en minoría.

Podrá hacerlo cuatro años si el líder del PP mantiene el compromiso que asumió ayer en la sesión de investidura. Alejandro Fernández se comprometió a no apoyar una moción de censura tras las elecciones generales de marzo de 2012 para desalojar a Ballesteros del cargo. "No pondremos trabas a Ballesteros, no pesará la espada de Damocles de una moción de censura durante todo el mandato", sostuvo Fernández.

El popular desveló el viernes que la cúpula de CiU lo había tentado con esta opción. La nacionalista Victòria Forns prefirió no referirse a ello y prometió una oposición "constructiva". Con la toma de posesión amaina la tormenta política que ha sacudido Tarragona esta última semana. La dirección de CiU forzó la ruptura de un pacto con el PP que Forns y Fernández tenían prácticamente cerrado.

En Lleida los socialistas no han tenido que esperar al último minuto para ver revalidada su alcaldía. Àngel Ros fue nombrado alcalde con mayoría absoluta tras lograr 15 de los 27 ediles. Ros tendió la mano a los grupos de la oposición y prometió racionalizar los cargos municipales para imponer austeridad en el Consistorio. Tras las elecciones municipales, la figura de Ros gana relevancia en el PSC, que en octubre escogerá un nuevo líder. Ayer Ros aclaró que priorizará "Lleida a los intereses del partido".

El PSC tendrá 204 alcaldes tras perder su condición de primera fuerza municipalista. CiU estrenó ayer este privilegio con la investidura de 458 alcaldes, aunque les falta por recoger la vara en las dos joyas de la corona: Barcelona y Girona, en las que la investidura será el 1 de julio tras sendos recursos del PP y ERC ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. Se estrenaron Joan Mora como alcalde de Mataró y Carles Pellicer en Reus, ambos de CiU, tras pactar con el PP. Los nacionalistas gobernarán en 30 de las 42 capitales de comarca; el PSC, en siete; ERC, en tres, e ICV, en una. Los republicanos se alzaron con su primera alcaldía metropolitana, la de Sant Vicenç dels Horts. Oriol Junqueras fue nombrado en el cargo tras pactar con CiU e ICV para desbancar al PSC. La Candidatura d'Unitat Popular formalizó su crecimiento con cuatro alcaldías, de las que la más importante es la Arenys de Munt (Maresme). Solidaritat se tuvo que conformar con una, la de Gallifa (Vallès Occidental).

Los Ayuntamientos de Barcelona y Girona se constituirán el 1 de julio. Un tercer Ayuntamiento tendrá que esperar: el de Roda de Barà (Tarragonès), que no pudo formarse al faltar la documentación de los nuevos concejales.