Los Ángeles del Infierno atacan en Cambrils

Abdoulaye Diop, senegalés de 34 años y vecino de Cambrils (Baix Camp), está convaleciente tras la agresión que sufrió el sábado por la noche y en la que le asestaron dos puñaladas. Los Mossos d'Esquadra investigan si el ataque tiene tintes racistas, ya que los dos autores detenidos portaban símbolos nazis y podrían pertenecer a los Ángeles del Infierno, una banda xenófoba y violenta.

A la una de la madrugada, tras la celebración de la Champions, el ambiente era festivo en el puerto de la localidad. Diop fue a tomar una copa con un amigo a una céntrica cervecería del paseo marítimo, de l...

Abdoulaye Diop, senegalés de 34 años y vecino de Cambrils (Baix Camp), está convaleciente tras la agresión que sufrió el sábado por la noche y en la que le asestaron dos puñaladas. Los Mossos d'Esquadra investigan si el ataque tiene tintes racistas, ya que los dos autores detenidos portaban símbolos nazis y podrían pertenecer a los Ángeles del Infierno, una banda xenófoba y violenta.

A la una de la madrugada, tras la celebración de la Champions, el ambiente era festivo en el puerto de la localidad. Diop fue a tomar una copa con un amigo a una céntrica cervecería del paseo marítimo, de la que es cliente habitual. Compró tabaco de la máquina expendedora e iba a salir a fumar, cuando una chica pasó a su lado y le propinó un fuerte pisotón. "Le dije: No hace falta que me pises, tan solo pídemelo y me apartaré", explica el joven.

Unos minutos después, se le acercaron dos chicos y sin decirle palabra empezaron a propinarle golpes, ante la atónita mirada de los clientes del bar. "Como pude, les expliqué que no quería problemas", expone Diop. Después, se unieron a la pelea más amigos de los agresores y continuaron pegándole. "Eran entre seis y ocho personas, no puedo recordarlo bien porque salí y me caí al suelo", dice apesadumbrado. Sacaron navajas y le propinaron dos puñaladas, una en el brazo y otra en la parte derecha del pecho. No podía levantarse por las magulladuras, pero en la zona había agentes de policía y acudieron a socorrerle.

Tras la pelea algunos de los agresores se escondieron en los baños del bar. La policía local los siguió y encontró varias navajas y el arma blanca con la que agredieron a Diop. "No los conozco, pero iban vestidos igual, con tatuajes y chalecos", afirma el joven senegalés. Los agresores llevaban en sus ropas símbolos nazis y de los Ángeles del Infierno, banda de moteros racistas conocida internacionalmente. Su lema es: Cuando hacemos el bien nadie se acuerda de nosotros. Cuando hacemos el mal, nadie lo olvida.

Diop quedó inconsciente por las puñaladas y fue trasladado al hospital de Sant Joan de Reus, en donde estuvo ingresado hasta el domingo. En el forcejeo también resultaron heridos uno de los dueños del bar y un cliente. La policía detuvo a dos personas y Diop ha denunciado los hechos. Lleva cuatro años viviendo en Cambrils, trabaja en la construcción y estará un mes de baja. "Fue una agresión racista, he avisado a mis compañeros senegaleses para que vayan con cuidado", concluye Diop.