Julià vuelve a hacerse con la concesión del autobús turístico tres meses después
La empresa Julià dejó la concesión del autobús turístico (que gestionaba bajo el nombre de Madrid Visión junto a Trapsa) el pasado mes de enero en plena bronca con el Ayuntamiento de la capital y vuelve tres meses después con la concesión de nuevo en el bolsillo.
El Ayuntamiento hizo público ayer que la unión temporal de empresas (UTE) constituida por Julià, Alsa y Transportes Bacoma ha obtenido la mejor puntuación en el concurso convocado y se hará cargo del servicio en un plazo de 112 días, con lo que podría estar funcionando el próximo mes de agosto. Entre los derrotados en el concur...
La empresa Julià dejó la concesión del autobús turístico (que gestionaba bajo el nombre de Madrid Visión junto a Trapsa) el pasado mes de enero en plena bronca con el Ayuntamiento de la capital y vuelve tres meses después con la concesión de nuevo en el bolsillo.
El Ayuntamiento hizo público ayer que la unión temporal de empresas (UTE) constituida por Julià, Alsa y Transportes Bacoma ha obtenido la mejor puntuación en el concurso convocado y se hará cargo del servicio en un plazo de 112 días, con lo que podría estar funcionando el próximo mes de agosto. Entre los derrotados en el concurso se encuentran empresas como El Corte Inglés, Globalia, Auto Res, City Sightseeing y el grupo Arriva. En total, se presentaron nueve ofertas.
Este periódico adelantó el pasado lunes que Julià era la elegida del Ayuntamiento, a pesar de todos los problemas que tuvo en el mes de enero, cuando Madrid Visión se negó a devolver los autobuses que por contrato pertenecían al Consistorio.
Los grupos de la oposición han criticado en numerosas ocasiones el funcionamiento de la anterior concesionaria y han denunciado en las comisiones de Movilidad y Economía diversos comportamientos de Madrid Visión. El concejal de Izquierda Unidad Ángel Lara, en declaraciones a Europa Press, aseguró ayer que llevará el caso a la Comisión de Vigilancia de las Contrataciones. "Hay cuestiones absolutamente inexplicables, como que hasta hace cuatro días el canon que pagaba la UTE era de un millón de euros porque decían que se movían poco más de 400.000 viajeros al año, y ahora pueden triplicar el canon e incluso ofertar hasta un sobrecanon del 19%", dijo Lara. Según el concejal, "nos han estado engañando con los datos publicados sobre el número de viajeros transportados".
El grupo socialista también criticó ayer la adjudicación.
La nueva UTE pagará al Ayuntamiento un canon de tres millones de euros al año, además de un 19% más si la facturación no supera los nueve millones de euros o un 6% si rebasa esta cantidad. Estas cantidades habían despertado las críticas en el sector, que considera que con ese canon difícilmente podrá obtener beneficios la nueva concesionaria.
El nuevo servicio contará con 26 autobuses, que deberán tener una antigüedad inferior a un año. Por el momento, la EMT es la encargada de mantener los autobuses turísticos en la calle hasta que se haga cargo la UTE elegida por el Ayuntamiento. El precio del billete será de 20 euros. Hasta ahora costaba 17,20.