Guerra abierta entre la Xunta y el Ayuntamiento

Es el último capítulo de una larga lista de encontronazos que jalonan la relación entre la Administración local y la autonómica desde que el Partido Popular ganó las elecciones, hace un año. La lucha por la capitalidad, el hospital único, la adjudicación del juzgado de lo mercantil... Y ahora el Plan de Ordenación do Litoral (POL). Hasta la propia ciudad se tuvo que desplazar el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, para frenar la alarma generada por el gobierno local. De poco sirvió. Apenas una hora más tarde comparecía el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), para ratificar...

Es el último capítulo de una larga lista de encontronazos que jalonan la relación entre la Administración local y la autonómica desde que el Partido Popular ganó las elecciones, hace un año. La lucha por la capitalidad, el hospital único, la adjudicación del juzgado de lo mercantil... Y ahora el Plan de Ordenación do Litoral (POL). Hasta la propia ciudad se tuvo que desplazar el conselleiro de Medio Ambiente, Agustín Hernández, para frenar la alarma generada por el gobierno local. De poco sirvió. Apenas una hora más tarde comparecía el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), para ratificarse en su postura y ahondar en que "el peligro existe" porque, asegura, así consta en el plan.

Hernández se plantó esta semana en la capital para subrayar que "ninguna nave, vivienda o construcción quedará fuera de ordenación por la aprobación del Plan do Litoral". La postura del gobierno pontevedrés la atribuye a que "o bien no entraron en el análisis del plan o bien están faltando a la verdad de modo consciente y deliberado". Y recordó que el documento "excluye" de su ámbito de aplicación los suelos que según el plan municipal vigente estén catalogados como urbano consolidado, no consolidado o urbanizable con proyecto de compensación aprobado y núcleo rural, como las viviendas que rodean ENCE. Mientras, en Lourizán, miran al cielo: "No me creo ni a Hernández ni a Cesáreo Mosquera ", dice Augusto Fontam.