Un atunero vasco denuncia un nuevo ataque de piratas frente a las costas de Somalia

El atunero vasco Campolibre Alai, con base en Bermeo (Vizcaya), denunció ayer un nuevo intento de ataque de piratas frente a las costas de Somalia. La tripulación del congelador, que consiguió huir antes de que los presuntos asaltantes lo alcanzaran, avisó a la Armada para que acudiera en su auxilio. Es el segundo intento de ataque denunciado por atuneros vascos en una semana, después de que otro buque, el Alakrana, consiguiera esquivar otra lancha pirata el pasado jueves. El Gobierno vasco comunicó al Ministerio de Defensa las quejas de falta de seguridad de los armadores que tr...

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El atunero vasco Campolibre Alai, con base en Bermeo (Vizcaya), denunció ayer un nuevo intento de ataque de piratas frente a las costas de Somalia. La tripulación del congelador, que consiguió huir antes de que los presuntos asaltantes lo alcanzaran, avisó a la Armada para que acudiera en su auxilio. Es el segundo intento de ataque denunciado por atuneros vascos en una semana, después de que otro buque, el Alakrana, consiguiera esquivar otra lancha pirata el pasado jueves. El Gobierno vasco comunicó al Ministerio de Defensa las quejas de falta de seguridad de los armadores que trabajan en esa zona.

El intento de ataque se produjo hacia la una y media de la tarde de España, cuando el atunero se encontraba muy lejos de la costa de Somalia, a unas 450 millas (833 kilómetros), en aguas internacionales. La tripulación del Campolibre Alai detectó con su radar una pequeña lancha situada a unas tres o cuatro millas, que se dirigía hacia el pesquero. Cuando comprobaron que esa embarcación realizaba movimientos sospechosos y los perseguía decidieron emprender la huida, según fuentes de la Asociación Nacional de Buques Atuneros Congeladores (Anabac), a la que pertenece Etxebastar Fleet, la compañía armadora del atunero.

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"Menos mal que no los pillaron con la red echada, porque si no, los hubieran alcanzado casi con toda seguridad", aseguró ayer un directivo de Anabac, que recordó el anterior intento de ataque, sufrido por el atunero Alakrana (también con base en Bermeo) el pasado jueves y que también logró huir. "La situación podría empeorar hacia mediados de septiembre, cuando comenzará el buen tiempo", añadieron desde Anabac.

Representantes de esa asociación se reunieron el pasado viernes con la consejera vasca de Pesca, Pilar Unzalu, a la que trasladaron sus quejas sobre la falta seguridad en la zona. Los armadores reclaman al Gobierno que tome medidas similares a las adoptadas por el Ejecutivo francés, que ha instalado militares armados en cada barco.

Unzalu trasladó ayer esas protestas y peticiones al Ministerio de Defensa, que dirige Carme Chacón. La consejera manifestó además su "apoyo inequívoco" al sector y aseguró que comparte "la preocupación por la seguridad de la flota atunera" y que el Gobierno vasco hará todo lo que esté en su mano para incrementar su seguridad.

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