Entrevista:RAFAEL SANZ-ESPERT Director de la Banda Municipal de Música | DÍAS DE DIVERSIÓN

"Los bilbaínos no saben la relevancia que tiene la Banda"

Rafael Sanz-Espert es un valenciano que hace siete años no dudó en dejarlo todo para dirigir la Banda Municipal de Bilbao. Pese a tener su vida resulta desde un punto de vista profesional y económico, le ilusionó el proyecto y las puertas que de esa forma se le abrían. Su objetivo es que todos los bilbaínos sean conscientes de que su banda compite en la liga mundial.

Pregunta. ¿Cuál es la banda sonora de Bilbao?

Respuesta. En Bilbao existe un referente indudable que es Juan Crisóstomo de Arriaga. Sin lugar a dudas, cuando la Banda Municipal toca su obertura d...

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Rafael Sanz-Espert es un valenciano que hace siete años no dudó en dejarlo todo para dirigir la Banda Municipal de Bilbao. Pese a tener su vida resulta desde un punto de vista profesional y económico, le ilusionó el proyecto y las puertas que de esa forma se le abrían. Su objetivo es que todos los bilbaínos sean conscientes de que su banda compite en la liga mundial.

Pregunta. ¿Cuál es la banda sonora de Bilbao?

Respuesta. En Bilbao existe un referente indudable que es Juan Crisóstomo de Arriaga. Sin lugar a dudas, cuando la Banda Municipal toca su obertura de Los esclavos felices se crea un momento muy especial que nos enorgullece. El objetivo es que cuando hablemos del sonido de Bilbao venga a la mente la Banda Municipal.

P. ¿Cómo se vive la Aste Nagusia desde la Banda?

R. La Aste Nagusia es motivo de festividad, pero por nuestros compromisos debemos vivirlas sin perder el norte. Hay que dar el callo, porque son días que vivimos con mucha intensidad. Por las mañanas, tocamos en el Arenal, lo que implica un total de 70 piezas, y por las tardes en Vista Alegre, lo que supone 19 piezas por cada corrida.

P. ¿Cuánto tiempo dedican a preparar el repertorio de la Aste Nagusia?

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R. Es muy difícil intentar cuantificar horas o días de trabajo para preparar las fiestas. Un músico nunca descansa. Tras los ensayos con la banda, el trabajo continúa en casa. Lógicamente, también influye el programa que tengas delante. Está claro que no le vas a dedicar el mismo tiempo si conoces o no la pieza o si tu instrumento tiene un protagonismo mayor.

P. ¿Cómo se elige el repertorio a interpretar?

R. Depende de si realizas un programa para el Euskalduna, el Teatro Arriaga o el quiosco del Arenal. En Aste Nagusia el público tiene que vivir y disfrutar la música, lo cual no es nada fácil. Se pueden interpretar piezas más o menos serias, pero al final todo tiene que ser una fiesta. Y, sobre todo, pasar muchas horas pensando y meditando qué programar. Ahí está parte del éxito del concierto.

P. Valencia, su lugar de nacimiento, es una zona donde las bandas cuentan con mucha acogida popular. ¿Resulta muy diferente el trato que reciben en el País Vasco?

R. Valencia tiene la mayor concentración de músicos por kilómetro cuadrado del mundo. Donde hay mucha cantidad, calidad tiene que haber. Desde un punto de vista profesional, es como un partido de fútbol: hay dos equipos, y aunque uno tenga más presupuesto o mejor plantilla, no tiene por qué significar que sea mejor. Le puedo decir con orgullo que nuestra banda puede ganar la Liga todos los años, e incluso la Champions. El problema es que no todos los bilbaínos son conscientes de ello, no saben la importancia y relevancia, tanto nacional como internacional, que tiene su banda.

Rafael Sanz-Espert

(Llombai, Valencia, 1960) tiene una larga trayectoria profesional. Formado en Valencia, París y Rotterdam, carga a sus espaldas 30 años dirigiendo prestigiosas bandas en la Comunidad Valenciana. En 2002 se hace cargo de la de Bilbao y en la actualidad, entre otras cosas, forma parte del consejo directivo de WASBE, una asociación que suma a bandas de 50 países.

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