Protesta desde Marbella
El pasado lunes, 18 de mayo, en la página 15 de la sección de España de EL PAÍS se publicó una información titulada Detenido en Marbella El Español, sanguinario jefe de la Camorra. En el cuerpo de la noticia, el periodista escribía: "En un hotel de Marbella, ciudad símbolo de la corrupción y las mafias internacionales, fue arrestado el sábado...".
En nombre de la ciudad de Marbella y en el mío propio, quiero trasladarle la más enérgica protesta por el tratamiento insultante e injusto que se hace del nombre de Marbella. La detención a la que alude su periódico se produjo en esta c...
El pasado lunes, 18 de mayo, en la página 15 de la sección de España de EL PAÍS se publicó una información titulada Detenido en Marbella El Español, sanguinario jefe de la Camorra. En el cuerpo de la noticia, el periodista escribía: "En un hotel de Marbella, ciudad símbolo de la corrupción y las mafias internacionales, fue arrestado el sábado...".
En nombre de la ciudad de Marbella y en el mío propio, quiero trasladarle la más enérgica protesta por el tratamiento insultante e injusto que se hace del nombre de Marbella. La detención a la que alude su periódico se produjo en esta ciudad por razones absolutamente fortuitas, porque el detenido ni siquiera residía aquí.
Por otra parte, la ciudad de Marbella no puede ser calificada por los lamentables episocios que ocurrieron en el pasado, que en nada tienen que ver con la situación política actual, y que no definen la idiosincrasia de una ciudad emprendedora que ha sido capaz con trabajo y esfuerzo de convertirse en referente nacional e internacional de excelencia y calidad.