Vitaminas para activar las ventas

La petición unánime de ayudas para apoyar la compra de vehículos y el aluvión de novedades que presentan las marcas de automóviles protagonizan el Salón de Barcelona 2009, que se podrá visitar hasta el 17 de mayo. Si hace apenas dos meses el certamen catalán luchaba contra una cancelación casi segura, hoy abre sus puertas una de las ediciones más interesantes de los últimos años. La muestra, que cumple su 90º aniversario, reúne a 55 fabricantes, prácticamente todos los que operan en España. Y junto a los modelos actuales se presentan las novedades de la "colección de verano", desde las que apr...

La petición unánime de ayudas para apoyar la compra de vehículos y el aluvión de novedades que presentan las marcas de automóviles protagonizan el Salón de Barcelona 2009, que se podrá visitar hasta el 17 de mayo. Si hace apenas dos meses el certamen catalán luchaba contra una cancelación casi segura, hoy abre sus puertas una de las ediciones más interesantes de los últimos años. La muestra, que cumple su 90º aniversario, reúne a 55 fabricantes, prácticamente todos los que operan en España. Y junto a los modelos actuales se presentan las novedades de la "colección de verano", desde las que aprovechan el salón para salir al mercado hasta las que llegarán en los próximos meses.

La deserción masiva anunciada por la mayoría de las marcas ante la caída de las ventas obligó a la organización a subvencionar su presencia. Y el apoyo financiero de los patrocinadores, desgravable del Impuesto de Sociedades -sufragan con 750 euros/m2 los gastos de los stands- ha obrado el milagro: es el salón español del automóvil más completo desde hace muchos años. La austeridad se refleja en los montajes y algunas actividades paralelas, como las espectaculares pistas de conducción 4 - 4, que han desaparecido. Pero se compensa con una avalancha de estrenos.

Las ayudas de los países europeos están salvando a las factorías españolas

Entre los protagonistas destacan modelos ecológicos como el Honda Insight, ya disponible, o la próxima generación del Toyota Prius, dos híbridos a la última que combinan un motor de gasolina y otro eléctrico. Pero también se presentan coches urbanos con estilo, como la versión descapotable del exitoso Fiat 500 o el Toyota iQ, la réplica japonesa al Smart, pero con 3+1 plazas. Hay utilitarios nuevos como los VW Polo y Nissan Cube, la puesta al día del Renault Clio, más versiones del Seat Ibiza o el Hyundai i20 3 puertas. Y en un tamaño superior se muestran familiares de estreno como el Skoda Yeti, un todoterreno medio y asequible, y los monovolúmenes Toyota Verso y Renault Scénic y Grand Scénic. Entre las propuestas más sofisticadas destacan el primer Audi A4 Allroad, el Opel Insignia OPC, el Mercedes Clase E Coupé, las gamas 2010 de Jaguar y Land Rover -con motores de gasolina y diésel más eficientes- y el Lexus 450h, un 4 - 4 grande con dos motores eléctricos y 299 CV que gasta 6,3 litros de media.

Sin embargo, el esplendor de los automóviles más exultantes y llamativos no eclipsa dos estrellas que brillan con luz propia por motivos bien diferentes. Una es la versión europea del popular Tata Nano, el utilitario creado para motorizar India, que con la crisis puede tener una oportunidad inesperada en los países desarrollados: costará unos 4.000 euros en España. Frente a él, comparte protagonismo el prototipo del Audi Q3, el modelo que junto a los Seat Exeo y la versión ST o familiar del Ibiza permitirá asegurar unos 15.000 empleos en España, 3.000 de ellos directos en la factoría de Martorell y 12.000 indirectos en los proveedores, según declaraba con satisfacción el hasta ahora presidente de Seat, Erich Schmitt, en su despedida.

Junto a la ofensiva de estrenos, que no se detiene a pesar de la crisis, el Salón de Barcelona está sirviendo de altavoz al clamor de todas las marcas en demanda de un nuevo Plan Prever que ayude a parar la caída del mercado. Y es que al éxito de las medidas adoptadas en los principales países europeos, que aparte de empujar las ventas, han permitido reducir los ERE en varias fábricas españolas, se ha unido el impacto de las que ofrece el Gobierno de Navarra (de 1.200 a 2.200 euros). En abril, primer mes de implantación, las ventas de coches han caído sólo un 7% en esta comunidad, frente al 45% del mercado español, un contraste sangrante para el sector.