Un anciano llevaba varios días muerto en una silla

Ovidio Domínguez Mosquera, de 88 años, apareció ayer muerto en su domicilio del céntrico barrio de Flores, en el casco histórico de O Carballiño. Su cadáver permanecía sentado en la silla del salón en avanzado estado de descomposición.

El cuerpo sin vida de Ovidio Domínguez fue encontrado por un mecánico del barrio que al, llevar varios días sin verlo, se temió lo peor. Al no responder a las llamadas en la puerta, este mecánico decidió colocar una escalera en una de las ventanas de la vivienda del fallecido, situada en el primer piso del edificio, sobre un comercio de comestibles. Desde...

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Ovidio Domínguez Mosquera, de 88 años, apareció ayer muerto en su domicilio del céntrico barrio de Flores, en el casco histórico de O Carballiño. Su cadáver permanecía sentado en la silla del salón en avanzado estado de descomposición.

El cuerpo sin vida de Ovidio Domínguez fue encontrado por un mecánico del barrio que al, llevar varios días sin verlo, se temió lo peor. Al no responder a las llamadas en la puerta, este mecánico decidió colocar una escalera en una de las ventanas de la vivienda del fallecido, situada en el primer piso del edificio, sobre un comercio de comestibles. Desde allí pudo ver el cadáver del octogenario, según confirman los vecinos. Todos en el barrio lo habían echado de menos durante los últimos días.

Tras el descubrimiento del cadáver, los vecinos avisaron a Protección Civil, a los bomberos de O Carballiño y a la Guardia Civil, cuyos agentes confirmaron que el anciano llevaba ya varios días muerto y que su fallecimiento se produjo por causas naturales.

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