Detenido por robar tallas de la capilla del castillo de Monterrei

Las piezas, de los siglos XVII y XVII, aparecieron tiradas en una cuneta

La Virgen de Gracia, una policromía del siglo XVII de gran valor artístico, y una imagen de San Antonio de Padua, del XVIII, aparecieron la semana pasada tirados en una cuneta de la carretera OU-113, en Castrelo do Val. Una llamada anónima había informado a la Guardia Civil de que las encontraría en ese vial en desuso. Y allí estaban, envueltas en una manta y deterioradas por la humedad. "Su restauración superará el valor de las propias imágenes", señala ahora el delegado del Archivo diocesano, Miguel Ángel González. Las dos piezas habían sido robadas en febrero de 2008 en la iglesia del Ca...

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La Virgen de Gracia, una policromía del siglo XVII de gran valor artístico, y una imagen de San Antonio de Padua, del XVIII, aparecieron la semana pasada tirados en una cuneta de la carretera OU-113, en Castrelo do Val. Una llamada anónima había informado a la Guardia Civil de que las encontraría en ese vial en desuso. Y allí estaban, envueltas en una manta y deterioradas por la humedad. "Su restauración superará el valor de las propias imágenes", señala ahora el delegado del Archivo diocesano, Miguel Ángel González. Las dos piezas habían sido robadas en febrero de 2008 en la iglesia del Castillo de Monterrei, "protegido con alarmas".

El delegado diocesano tenía ya entonces pocas dudas de que los ladrones decidirían devolverlas porque el patrimonio religioso está identificado y resulta "casi imposible venderlo". "Ningún anticuario se atreve a comprar esas piezas", señala González. Ayer, la Guardia Civil detuvo a M. J. S., un verinense de 35 años, como presunto autor del robo y, según fuentes policiales, de la llamada anónima.

En los últimos meses ha habido una docena de robos sólo en capillas de Verín y González no oculta su preocupación. La Diócesis ha reforzado la seguridad de sus inmuebles pero los robos continúan. "La mayoría los cometen bandas especializadas", sostiene González, aunque en el caso de Monterrei el ladrón era un "auténtico chapuzas" a la vista del "grave deterioro" de las imágenes.

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