Los comercios venden ilusión contra la crisis

Todo indica que hasta los Reyes Magos y Olentzero se apretarán el cinturón este año. Puede que el viandante vea el habitual ajetreo en las calles y sufra las colas para empaquetar regalos, pero el descenso de las ventas registrado durante los meses de septiembre y octubre auguran malas cifras para el comercio vasco durante un periodo, las navidades, en el que algunas tiendas llegan a facturar hasta un tercio del total anual. Por eso, los descuentos, en algunos casos significativos, se suceden.

Los comerciantes afrontan estas fechas con una doble sensación: saben que el invierno será más...

Todo indica que hasta los Reyes Magos y Olentzero se apretarán el cinturón este año. Puede que el viandante vea el habitual ajetreo en las calles y sufra las colas para empaquetar regalos, pero el descenso de las ventas registrado durante los meses de septiembre y octubre auguran malas cifras para el comercio vasco durante un periodo, las navidades, en el que algunas tiendas llegan a facturar hasta un tercio del total anual. Por eso, los descuentos, en algunos casos significativos, se suceden.

Los comerciantes afrontan estas fechas con una doble sensación: saben que el invierno será más frío que nunca pero, lejos de resignarse, tienen que echar el resto para remontar después de un año de recesión y para empezar bien un año 2009 para el que las previsiones son aún peores. Todo tipo de ofertas, promociones, bonos regalo y lemas para incentivar el consumo están bombardeando a un cliente que este año será más reflexivo y aprovechará la coyuntura para buscar chollos sin precedentes.

Todos coinciden en que el me ensaje enstos días debe ser de optimismo

"Es importante para el sector contar con liquidez para pagar lo que ha comprado"

Negocios familiares de moda en San Sebastián "lo estan pasando mal"

Los comercios no quieren abrir los festivos, pero sí ampliar los horarios

"Ojalá empezaran antes las rebajas de enero", es un deseo recurrente a la hora de comprar los obligados regalos o ropa nueva con la que sobrevivir con estilo a cotillones, comidas familiares y cenas de empresa. Este año, cualquiera diría que ese sueño se ha hecho realidad. Escaparates de grandes cadenas de ropa anuncian descuentos de hasta el 50%. "Estoy aprovechando a tope estas ofertas para comprar los regalos lo antes posible y la ropa que tenía pensado comprarme en las rebajas de enero. Así mato dos pájaros de un tiro", señala Alba, una veinteañera que rebusca en la sección de oportunidades de una franquicia de ropa juvenil. En su familia han decidido este año utilizar el sistema del amigo invisible, más popular que nunca para gastar menos sin que nadie se quede sin regalo.

Según las encuestas de 2008 sobre hábitos en el consumo de Vizcaya, el 43% de los consumidores reconocen que necesitan ahorrar para hacer frente a futuros aprietos económicos. Los consultados en las tiendas coinciden en que este año gastarán menos, ya sea comprando regalos más baratos o limitándose sólo a presentes prácticos y deseados. "Yo compraré los mismos regalos que otros años, pero estoy mirando más los precios y he comprado alguna ganga por Ebay, como una bici para mi hermano", comenta Sergio Álvarez mientras echa un vistazo a un escaparate del Casco Viejo bilbaíno.

Especialmente para los más jóvenes, Internet será el gran aliado. Según datos de la Cámara de Comercio de Bilbao, sólo el 17% de los consumidores hace compras on-line. Portales como Ebay o Amazon permiten hacerse con productos a mejor precio y ahorrarse el bullicio de las tiendas. Pero además de ese pequeño porcentaje, cada vez son más los que utilizan Internet para comparar precios antes de ir de compras. "Los dependientes notan un consumidor menos impulsivo, que lleva pensado su presupuesto y ha contrastado los precios en la Red", confirma Mari Paz Irastorza, responsable de Comercio Interior de la cámara bilbaína.

Esa actitud reflexiva "lleva a buscar con más determinación la mejor oferta", añade. Es por ello que la Cámara, el Ayuntamiento de Bilbao y las asociaciones de comerciantes han recomendado a las tiendas que, durante estos días, lancen promociones atractivas. "Las rebajas encubiertas suponen una competencia desleal. Pero no hablamos de eso, sino de hacer un esfuerzo por ser más competitivos, cumpliendo la ley pero aportando cualquier detalle que incentive a la compra", explica Irastorza.

Los escaparates están más cuidados que nunca y exhiben lemas como Regalar está de moda para que la parte más consumista del espíritu navideño no se aletargue. Sectores que no acostumbran a hacer rebajas, como las peluquerías y las joyerías, han empezado a practicar descuentos en sus productos y servicios. "Es importante para el sector, porque necesita liquidez para pagar lo comprado. Es bueno para el propio consumidor y la población lo está pidiendo a gritos", valora Josetxu Jaio, homólogo de Irastorza en la Cámara de Comercio de Álava.

Sin embargo, las ofertas han despertado malestar en algunos pequeños empresarios. "En San Sebastián, las multinacionales impulsan rebajas encubiertas desde noviembre. Los negocios familiares, sobre todo los de moda, lo están pasando francamente mal", lamenta Maite Jauregi, miembro de Zaharrean, la asociación de comerciantes de la Parte Vieja donostiarra. Dueña de un negocio de artesanía vasca, percibe una campaña de Navidad "triste y lenta", y un 2009 "más negro aún". Su asociación ha optado por ganar en atractivo publicando calendarios de fotos antiguas de la ciudad y sorteando 6.000 euros a gastar en un día durante las rebajas.

Al sector textil pertenece Javier López, miembro de la agrupación comercial Bilbao Centro y responsable de una tienda de ropa. "Otros años, a primeros de diciembre ya estábamos empaquetando regalos. Pero tenemos la esperanza de que no falte el regalo a pie de árbol, aunque quien regale jerseys este año opte por una corbata", explica. Intentará no hacer descuentos, porque cree que es mejor que "quien pueda aguantar" mantenga los precios. "No quiero gastar cartuchos saliendo ahora al 30%, porque si el 15 de enero tienes que bajar al 70%, la gente no te mirará a la cara. Lo que se haga tiene que ser excepcional; no podemos permitir tirar los precios cada vez más".

Euskadi es la única comunidad autónoma en la que los comercios no abren los festivos. Ni comerciantes ni clientes ven la necesidad de hacerlo. "Sólo compensa en ciudades muy turísticas. En Bilbao, quien te compre el domingo será el vecino que de todos modos compraría el lunes", apunta López. Sólo un 17% de la población vizcaína es crítica con los horarios actuales, según los datos de la Cámara de Comercio, pero lo que pide ese porcentaje es que se cierre más tarde y se abra al mediodía. Los comerciantes se muestran más abiertos a ampliar horarios. El empresario de textiles abrirá en mediodía y no descarta ampliar el cierre hasta las 21 horas.

Pese a las dificultades, todos prefieren ver oportunidades en la crisis. Por ejemplo, para animarse a mejorar la imagen corporativa, la decoración de las tiendas, repensar a qué sector dirigirse o pedir a las instituciones que inviertan en atraer más turismo comercial a Euskadi. Además, coinciden en que el mensaje ha de ser de optimismo. "Hay que convencer al consumidor de que prime la ilusión de regalar por Navidades. Tenemos que sobrevivir vendiendo optimismo y echándole imaginación", concluye López.