"No podemos caer en el juego de quienes nos quieren perjudicar"
La irritación que pueda haber causado entre los dirigentes del PP vasco la andanada crítica lanzada el pasado sábado por José María Aznar contra su sucesor al frente de la formación, Mariano Rajoy, se va a quedar, por el momento, de puertas para adentro. Si Rajoy ha impuesto a sus más próximos que no entren en la pugna que quieren abrir Aznar y Esperanza Aguirre, los populares vascos, alienados claramente con Rajoy en la crisis que vivió el partido en primavera y el posterior congreso de Valencia, no quieren desentonar. Hasta tres veces evito ayer Iñaki Oyarzabal entrar a replicar a fondo a lo...
La irritación que pueda haber causado entre los dirigentes del PP vasco la andanada crítica lanzada el pasado sábado por José María Aznar contra su sucesor al frente de la formación, Mariano Rajoy, se va a quedar, por el momento, de puertas para adentro. Si Rajoy ha impuesto a sus más próximos que no entren en la pugna que quieren abrir Aznar y Esperanza Aguirre, los populares vascos, alienados claramente con Rajoy en la crisis que vivió el partido en primavera y el posterior congreso de Valencia, no quieren desentonar. Hasta tres veces evito ayer Iñaki Oyarzabal entrar a replicar a fondo a lo que consideró un "numerito fomentado por determinados grupos de comunicación y los partidos que quieren hacer daño al PP". Y abundó: "Hay dirigentes y ex dirigentes del partido que cogen un micrófono cada dos días y no podemos estar haciendo comentarios sobre lo que opina cada uno".
Tampoco existe, en su opinión, una guerra ideológica abierta en el seno del PP: "Son divisiones en que nos quieren hacer caer quienes nos quieren perjudicar. No podemos caer en ese juego".
Con todo, de las palabras del número dos de los populares vascos, quedó claro un mensaje en máxima sintonía con el del equipo de confianza de Rajoy: el PP está "en condiciones de ganar las próximas elecciones" y "todos", tanto en Euskadi como a nivel nacional, se hallan "remando en la misma dirección" para que Antonio Basagoiti gane las elecciones autonómicas del próximo mes de marzo y Rajoy se imponga a los socialistas en las generales entrantes.