Torraspapel cerrará dos plantas y suprimirá 400 empleos en España

Torraspapel, la empresa fabricante de papel perteneciente al fondo CVC Capital Partners, prepara un plan de reestructuración que supondrá un recorte de unos 400 de los 3.000 puestos de trabajo que tiene en España. El plan supone el cierre de las fábricas de Amorebieta, en el País Vasco, y la de Algeciras, así como un ajuste en la planta catalana ubicada en la población gerundense de Sarrià de Ter.

"La crisis estructural del sector papelero a nivel mundial y la coyuntura económica actual han obligado a la compañía a tomar esta decisión", señaló ayer la empresa en un comunciado. Con el aj...

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Torraspapel, la empresa fabricante de papel perteneciente al fondo CVC Capital Partners, prepara un plan de reestructuración que supondrá un recorte de unos 400 de los 3.000 puestos de trabajo que tiene en España. El plan supone el cierre de las fábricas de Amorebieta, en el País Vasco, y la de Algeciras, así como un ajuste en la planta catalana ubicada en la población gerundense de Sarrià de Ter.

"La crisis estructural del sector papelero a nivel mundial y la coyuntura económica actual han obligado a la compañía a tomar esta decisión", señaló ayer la empresa en un comunciado. Con el ajuste, la compañía reducirá la producción en más de 160.000 toneladas de papel estucado.

La compañía, que ya ha informado de su plan tanto al Gobierno central como a los ejecutivos autónomos afectados, pretende con esta reestructuración situar al conjunto del grupo en una posición más competitiva. Torraspapel cuenta con otras factorías que continuarán operando con normalidad, las ubicadas en Almazán (Soria), Leitza (Navarra), Motril (Granada), Sant Joan Les Fonts (Girona), Uranga (Guipúzcoa) y Zaragoza.

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Torraspapel pasó a manos de CVC en 1999, cuando el grupo kuwaití KIO vendió una de sus inversiones estrella en España.

100 recortes en Reyal

Los recortes de plantilla afectarán también a Reyal Urbis. La crisis del sector empuja a la inmobiliaria a recortar cerca de 100 empleos, según fuentes cercanas a la empresa, informa Luis Doncel. Reyal, cuya rama inmobiliaria tiene ahora medio millar de trabajadores, se encuentra en un proceso de desinversión de activos por un valor cercano a los 2.000 millones de euros.

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