Un juez aparta a una maestra por presunto maltrato a niños
Un juzgado de Barcelona ha instado a una guardería de Barcelona a apartar de su puesto de trabajo a una maestra que habría cometido un presunto maltrato a niños del centro. La decisión judicial se produce tras una denuncia presentada hace un año por la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, según informó ayer el diario Avui. La denuncia de la Fiscalía tiene su origen en una queja presentada por ex empleadas del centro Sant Àngel, situado en la calle Gran de Sant Andreu de Barcelona.
El despacho del abogado que defiende al centro, Jordi Tirvió, se limitó a decir q...
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Un juzgado de Barcelona ha instado a una guardería de Barcelona a apartar de su puesto de trabajo a una maestra que habría cometido un presunto maltrato a niños del centro. La decisión judicial se produce tras una denuncia presentada hace un año por la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, según informó ayer el diario Avui. La denuncia de la Fiscalía tiene su origen en una queja presentada por ex empleadas del centro Sant Àngel, situado en la calle Gran de Sant Andreu de Barcelona.
El despacho del abogado que defiende al centro, Jordi Tirvió, se limitó a decir que las acusaciones contra la maestra no son ciertas. El propio letrado evitó hacer declaraciones y desde su despacho una empleada dijo que se ha presentado recurso contra la decisión del juzgado. La guardería es un centro concertado con el Departamento de Educación de la Generalitat.
Varias familias que a última hora de la tarde de ayer estaban a las puertas del centro para recoger a sus hijos dijeron estar satisfechos con la guardería. "Nunca hemos tenido quejas. Aquí ha habido siempre buen trato", dijo un padre. "Nunca hemos tenido ninguna queja, pero quizá esta señora pudo tener un exceso", dijo una madre. "He traído aquí a varios hijos, incluido a uno que ahora tiene ya 17 años, y no tengo queja alguna", destacó un padre. En el centro, declinaron la petición de este diario para explicar su posición en este caso tanto por teléfono como a las puertas de la propia guardería.
Los hechos en litigio tienen su origen en denuncias de ex trabajadores presentadas hace un año y medio ante el Síndic de Greuges. La dirección del centro escolar negó entonces la acusación que se le imputaba. La Generalitat realizó inspecciones en el centro, incluso sin previo aviso, y no detectó irregularidades.
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