Habitat necesita otro acuerdo con la banca para no suspender pagos
Habitat, la quinta inmobiliaria española, sólo tiene dos salidas: lograr otra refinanciación de la banca para luego concentrarse en hallar un comprador o solicitar el concurso de acreedores. Siete meses después de refinanciar in extremis su deuda de 1.600 millones por la compra de Ferrovial Inmobiliaria, la promotora que preside Bruno Figueras ha enviado una circular a las entidades financieras acreedoras para advertirles de que no podrá abonar los 35 millones por los intereses del préstamo. Si no aceptan aplazar el pago de esta cantidad, deberá suspender pagos.
Fuentes cercanas ...
Habitat, la quinta inmobiliaria española, sólo tiene dos salidas: lograr otra refinanciación de la banca para luego concentrarse en hallar un comprador o solicitar el concurso de acreedores. Siete meses después de refinanciar in extremis su deuda de 1.600 millones por la compra de Ferrovial Inmobiliaria, la promotora que preside Bruno Figueras ha enviado una circular a las entidades financieras acreedoras para advertirles de que no podrá abonar los 35 millones por los intereses del préstamo. Si no aceptan aplazar el pago de esta cantidad, deberá suspender pagos.
Fuentes cercanas a la empresa señalaron que el consejo de administración de ayer aprobó unas pérdidas de 650 millones de euros desde 2007 hasta junio de 2008. Éstos son precisamente los números rojos que Figueras preveía hasta 2010 y que ha registrado en 18 meses.
A Figueras se le abre otro frente. Dos accionistas, José Antonio Castro y Dolores Ortega, presentaron una demanda contra el presidente de la inmobiliaria. Fuentes accionariales afirmaron que ahora el propietario de Mango, Isak Andic, y las familias Cuatrecasas y Rodés estudian sumarse a ellos.
Fuentes cercanas a la empresa explicaron que a finales de año la situación será más dramática, puesto que el valor de sus activos habrá caído y el pasivo aumentará. Por ello, Habitat ha encargado la búsqueda de un comprador a la banca de inversión Rothschild. Hoy la empresa se reunirá con los ocho mayores bancos acreedores para presentarles un nuevo plan de viabilidad y tratar de arrancarles algún preacuerdo.