Quintana dice que no va "a tener en cuenta los ataques del presidente"

Para Anxo Quintana no hay conflicto. Y a pesar de que reconoció "haber leído algunos ataques del presidente" en las últimas horas, aseguró que no los va "a tener en cuenta". El vicepresidente de la Xunta evitó así entrar en contradicción con su socio de gobierno, Emilio Pérez Touriño, quien había recomendado a los nacionalistas apearse "del bus electoral". "El presidente realizó una muy buena faena el jueves", dijo Quintana, "y yo me quedo con esa buena faena y concuerdo con él en que éste es el gobierno más estable del período autonómico". Se refería a la solemne declaración de no adelantar l...

Para Anxo Quintana no hay conflicto. Y a pesar de que reconoció "haber leído algunos ataques del presidente" en las últimas horas, aseguró que no los va "a tener en cuenta". El vicepresidente de la Xunta evitó así entrar en contradicción con su socio de gobierno, Emilio Pérez Touriño, quien había recomendado a los nacionalistas apearse "del bus electoral". "El presidente realizó una muy buena faena el jueves", dijo Quintana, "y yo me quedo con esa buena faena y concuerdo con él en que éste es el gobierno más estable del período autonómico". Se refería a la solemne declaración de no adelantar las elecciones que Touriño pronunció hace tres días en Monte Pío.

"En cualquier caso, todo el mundo sabe cuál fue el partido que introdujo el debate sobre la fecha electoral", matizó, antes de ironizar sobre las diferentes opiniones internas del PSdeG: "Entiendo que el presidente, que además es secretario general de su partido, no pueda abroncar en público a sus compañeros, pero que no meta a los demás en el lío que ellos mismos han creado".

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"La novedad sería que el presidente y yo no habláramos", aseguró Quintana

Anxo Quintana, que compareció ante la prensa tras finalizar la reunión del Consello Nacional del BNG en la que se decidió el 5 de octubre para designar candidato a la presidencia, continuó con halagos a Pérez Touriño: "Siempre me alegro de que el presidente de mi país acierte, y ha acertado al no adelantar las elecciones". Y aprovechó esa "alegría" para atacar al líder del PP en Galicia, Alberto Núñez Feijóo. "El señor Feijóo lleva todo el mes deseando que el presidente se equivoque", aseguró, "pero alguien que aspira a presidir la Xunta no debería alegrarse de que a Galicia le vaya mal".

Preguntado por el encuentro que Emilio Pérez Touriño anunció entre los dos socios de la Xunta para la semana entrante y en el que el presidente pretende recuperar "la situación de trabajo estupenda de estos tres años", el vicepresidente le restó trascendencia. "La novedad sería que esta semana no nos reuniéramos", apuntó, "porque nuestros contactos son continuos y estables". "Además, el presidente sabe que siempre estoy a disposición para hablar", concluyó.

Pero antes de extenderse sobre las relaciones PSdeG-BNG, Anxo Quintana había hecho una alabanza de la organización que lidera como portavoz nacional. "El BNG es la fuerza política capaz de unir a nacionalistas y a galleguistas en la busca de dos objetivos comunes", resumió, "que los recursos de Galicia sirvan para generar bienestar y que este país alcance otro lugar institucional en el Estado, en Europa y en el mundo". Para el nacionalista, los apoyos que Touriño ha cosechado tras decidir no adelantar las elecciones al otoño prueban que "la mayoría de la sociedad gallega se alegra cuando se decide sin pedir permiso a Madrid, y el BNG siempre, no sólo un día, actúa así".

Quintana, acompañado del coordinador del Consello Nacional y diputado en el Congreso Francisco Jorquera, se erigió en intérprete de la voluntad ciudadana y desgranó "lo que quiere la mayoría de la sociedad gallega": "No una guerra con Madrid, sino ser gallegos y gallegas en el mundo".

Jorquera explicó los detalles de la Asemblea Nacional extraordinaria, en la que el BNG proclamará su candidato a la Xunta y que se celebrará en octubre. La asamblea nacionalista se realizará, por primera vez, mediante sistema de delegados. El Consello Nacional de ayer aprobó, con "más de un 80% de voto a favor", el nuevo método, que juntará a 1.200 delegados repartidos por comarcas de manera proporcional al número de afiliados.