El futuro de la agricultura
A finales de esta semana se reúne en Ginebra la Organización Mundial del Comercio. Entre otros temas, tratará de la limitación de las ayudas directas de los Estados a sus agricultores, de la reducción de los aranceles a los productos agrícolas procedentes de países terceros y de la disminución de las ayudas a la exportación de los productos agropecuarios propios. Acuerdos que luego tendrá que respetar la Unión Europea. Si todo ello se aprueba -y es lo más probable-, ya puede el Gobierno de Zapatero comenzar a plantearse la jubilación anticipada de todos los agricultores.
Si ahora ya no ...
A finales de esta semana se reúne en Ginebra la Organización Mundial del Comercio. Entre otros temas, tratará de la limitación de las ayudas directas de los Estados a sus agricultores, de la reducción de los aranceles a los productos agrícolas procedentes de países terceros y de la disminución de las ayudas a la exportación de los productos agropecuarios propios. Acuerdos que luego tendrá que respetar la Unión Europea. Si todo ello se aprueba -y es lo más probable-, ya puede el Gobierno de Zapatero comenzar a plantearse la jubilación anticipada de todos los agricultores.
Si ahora ya no hay jóvenes que quieran dedicarse al campo, dentro de poco no quedará nadie dedicado a esta tarea. ¿Qué haremos con nuestras tierras? ¿Venderlas a las grandes superficies comerciales y que sean ellas las que cultiven los productos que venden? Al menos que nos las paguen bien, pues hay muchas ilusiones, dineros y sudores enterrados en las mismas.